Los trabajadores con los sueldos más bajos podrán beneficiarse de las nuevas medidas adoptadas por la Agencia Tributaria. A partir de este mes apreciarán una cierta subida en sus nóminas. Sobre todo entre aquellos que cobren por debajo de los 2.500 euros mensuales.
Más que una reducción de impuestos, como se puede interpretar a simple vista, se trata de un ajuste del IRPF. Dicha medida se aplicará sobre los que tengan ingresos inferiores a los 35.200 euros al año. Esto se dejará notar en los salarios a partir de ahora, con un aumento del dinero que perciban.
Esta actualización permitirá que sean millones los trabajadores que salgan beneficiados por esta postura. Se estima que al cabo del año puedan percibir en torno a los 1.000 euros más. Por lo que prácticamente se puede considerar un extra con el que no contábamos.
Según las estimaciones que realizan desde Hacienda, podrán aprovecharse de esta rebaja del IRPF en torno al 80% de las personas ocupadas. Entre otras cosas, aquellos que ganen menos de 15.000 euros quedarán exentos de abonar dicho impuesto. Hasta la fecha, el límite quedaba fijado en los 14.000.
A ello se le une que los que ingresen por debajo de los 21.000 euros también tributarán menos a la Agencia Tributaria. Pero no serán los únicos beneficiados, ya que esta situación se extiende también para los que tengan sueldos hasta los 32.500 euros anuales.
¿En qué consiste este ajuste de retenciones?
Desde el Ministerio de Hacienda aclaran que no se trata de una rebaja de impuestos, ya que es un ajuste de las retenciones. Este año, por ejemplo, se incrementará el umbral en el que no se practicará retenciones a ciertos trabajadores. En el caso de una persona ocupada, soltera y con un hijo se pasará de los 15.947 hasta los 17.270 euros, recoge El Ideal.
Además se aumenta el umbral de ingresos que permite disfrutar de una limitación en las retenciones máximas. De los 22.000 euros se situará en los 35.200. De esta forma, un ciudadano casado con unos ingresos de 22.001 euros contará con unas retenciones de unos 1.200 euros.
Con anterioridad, la retención habría sido prácticamente el doble, ya que hubiera llegado hasta los 2.300 euros. Por eso, el ahorro de casi 1.000 euros que podrán notar los profesionales en sus nóminas a partir de ahora. La Agencia Tributaria consigue así evitar la retención de una mayor cantidad de dinero. Al mismo tiempo subsana los conocidos como errores de salto.
Cómo afecta a la Declaración de la Renta
Las modificaciones fiscales introducidas por Hacienda este ejercicio también se dejarán notar a la hora de realizar la Declaración de la renta. Será una de las grandes novedades para este curso. Los cambios incrementan el límite a partir del cual resulta obligatoria la presentación de la declaración.
Hace unos meses introdujeron una reducción del IRPF a la mitad de los trabajadores, que eran los que tenían unos sueldos más bajos. El beneficio fiscal se practicaba para las rentas de hasta 18.000 euros hasta 2022. Sin embargo, a partir de este ejercicio se amplía hasta los 21.000 euros.
De la misma manera, la disminución por rendimientos del trabajo se fijará entre los 15.000 y 21.000 euros. Calculan que dicho planteamiento pueda afectar a casi el 50% de los profesionales en activo.
Además, la medida también afecta al mínimo de tributación, que se eleva de 14.000 a 15.000 euros para el soltero sin cargas familiares. Por su parte, la situación también varía para los que tengan familia. En su caso, un asalariado con dos hijos y que presente la declaración conjunta le incrementará de 18.000 a 19.000 euros.