Ford prepara un Expediente de Regulación de Empleo para 1.144 trabajadores de la planta de Almussafes (Valencia). Los sindicatos y la empresa han llegado a un acuerdo que pasa por la prejubilación a partir de los 53 años. Se trata de una fórmula utilizada habitualmente para despidos masivos.
El propio Gobierno de Pedro Sánchez ha consolidado el modelo de las prejubilaciones a partir de los 52 años. Se trata de un retiro anticipado que combina la prestación por desempleo con la compensación de la empresa. El trabajador suele cobrar una parte de la nómina hasta la jubilación.
Además, existen convenios especiales con la Seguridad Social para mejorar la pensión de jubilación en estos casos. Esta fórmula nació como una medida de protección a los parados, pero se ha convertido en la regla general para miles de trabajadores. Si te quieres prejubilar a los 52 años, presta atención.
Cada vez más parados mayores de 52 años
El Gobierno de Pedro Sánchez recuperó en 2018 el subsidio para desempleados de más de 52 años. Desde entonces, incluso con la recuperación de los datos de empleo, el número de beneficiarios de esta prestación no ha dejado de aumentar. Lo que tenía que ser una excepción se ha convertido en regla.
Desde 2018 a 2023, el número de trabajadores que cobran el subsidio para mayores de 52 años ha aumentado un 52%. Se trata de la ayuda que más sube, muy por encima de la prestación contributiva o el Ingreso Mínimo Vital. Y lo peor es que se ha acabado convirtiendo en una forma de vida para muchos.
El subsidio para mayores de 52 años se acaba convirtiendo en un paro de larga duración que acaba con la jubilación anticipada forzosa. El fin de los ERTE y la recuperación del empleo tampoco han conseguido poner fin a esta situación. De hecho, la incertidumbre actual agrava el problema.
Castigo a la jubilación anticipada
Ante la crisis actual, muchas empresas empiezan a retomar los ajustes de plantilla como práctica habitual para reducir costes. El modelo actual incentiva el despido de los empleados más veterano. Pero la edad se va alargando y podría llevar a la prejubilación a los 48 años.
De hecho, el 55% de los parados en España ya supera los 45 años de media (esto es un 20% que antes de la crisis financiera). El Gobierno ha tratado de poner freno castigando la jubilación anticipada. Acaba penalizando al trabajador, pero no consigue disuadir a las empresas de su política de ajustes.
Los trabajadores mayores de 52 años, ante la falta de políticas de empleo eficaces, se ve arrojado a una temprana expulsión del mercado laboral. Su modo de subsistencia acaba siendo encadenar subsidios hasta la prejubilación. En el mejor de los casos, se puede beneficiar de los convenios.
Subsidio para mayores de 52 años y prejubilación
El subsidio para mayores de 52 años es una prestación del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) que cotiza para la jubilación. En concreto cotiza por el 125% de la base mínima de cotización. Actualmente la base mínima está en 1.166,70 euros al mes, así que el subsidio cotiza por 1.458,37 euros al mes.
A los trabajadores con una cotización más alta les conviene más la prejubilación que seguir cobrando el subsidio. Estos trabajadores pueden solicitar la jubilación anticipada siempre que cumplan con una serie de requisitos:
- - Hay que tener un mínimo de 35 años cotizados a lo largo de la vida laboral. Dentro de estos períodos puede añadirse las lagunas de cotización y las cotizaciones ficticias.
- - Los trabajadores con 37 años y seis meses cotizados pueden jubilarse anticipadamente a los 63 años. Sin este mínimo cotizado, pueden jubilarse a los 64 años y 2 meses.
La incertidumbre actual hacer prever más ajustes de plantillas en los próximos años. Ante esta situación, se consolida el modelo introducido por el Gobierno actual con importantes cambios. Los trabajadores cobrarán el subsidio junto con una parte de la nómina hasta la jubilación.