Aunque el budismo perdió parte de su relevancia hace muchos siglos, la religión budista sigue siendo una de las que más seguidores tienen. En las últimas décadas el interés por el budismo se ha incrementado en todo el mundo, especialmente en Occidente, donde hay muchos budistas que siguen las tradiciones del budismo zen o del tibetano.
En este artículo explicaremos qué es el budismo y cuáles son sus creencias, principios, enseñanzas y conceptos fundamentales. Además resumiremos su origen, su historia y las similitudes y diferencias entre las distintas escuelas de esta religión.
¿Qué es el budismo?
La religión budista es la cuarta con más creyentes del mundo, superada sólo por el cristianismo, el islam y el hinduismo. Se calcula que hay entre 488 y 535 millones de budistas en el planeta, es decir, aproximadamente el 8% de la población mundial.
La mitad de los seguidores del budismo viven en China. Esta religión también es muy relevante en Tailandia, Japón, Myanmar (o Birmania), Sri Lanka, Camboya y otros países del sur y del sureste de Asia.
Además de una religión, el budismo es una filosofía y un estilo de vida que promueve ciertos principiosmorales; en las religiones asiáticas, como el hinduismo, el sijismo y el jainismo, se denomina “Dharma” a una serie de normas de conducta que favorecen el mantenimiento y la estabilidad del orden social y del cósmico.
En cuanto al significado del término "budismo", éste viene de la palabra buddhi, que significa “despertar” o “inteligencia” en sánscrito. Según los budistas, sus principios tienen como objetivos que quienes las siguen den un sentido a su vida, desarrollen la sabiduría para comprender el mundo, tengan una conducta ética y sean conscientes de sus acciones y de sus pensamientos.
Buda y la historia de la religión budista
Se cree que el fundador del budismo fue Siddhartha Gautama, un hombre que nació en el actual Nepal entre los siglos VI y V a. C. Los detalles sobre su biografía son inciertos, puesto que existen numerosas narraciones que se contradicen entre ellas.
Gautama, que sería conocido posteriormente como “el Buda”, fue un sabio estudiante de los Vedas, textos religiosos que surgieron en el subcontinente indio hace entre 2 y 3 mil años y que son también muy relevantes para el hinduismo, siendo en esta religión los libros sagrados.
El Buda no es considerado un dios (el budismo es una religión sin dioses), aunque sí una persona con características sobrehumanas que alcanzó la iluminación a través de la meditación o Dhyana y transmitió sus enseñanzas a un gran número de discípulos.
Aunque su popularidad descendió en la India durante la Edad Media, la religión budista se expandió al resto de Asia e incluso a Grecia. Posteriormente el hinduismo, el islam y el cristianismo sustituyeron al budismo en muchos de los países donde había sido predominante.
Las escuelas budistas
La mayoría de budistas siguen las tradiciones Mahayana, Theravada o Vajrayana. También son importantes el budismo zen, el tibetano y el nichiren.
1. Theravada
Se considera que la vertiente Theravada es la forma más ortodoxa de budismo, es decir, la más cercana a la original. Predomina entre los budistas de Sri Lanka, Myanmar, Tailandia y Camboya, y también es relativamente común en China.
El Theravada promueve la obtención de experiencia y de conocimiento, así como el desarrollo de la racionalidad, y prioriza el papel de los monjes por encima del de la gente común.
2. Mahayana
El budismo Mahayana es el más popular de todos, siendo especialmente importante en países del este de Asia como China, Japón, Corea y Singapur.
Su interpretación de las enseñanzas de Buda es más libre que la del Theravada y ha ido variando a lo largo de la historia. Según el Mahayana, el objetivo del budismo es el bienestar de todos los seres vivos.
3. Vajrayana
El Vajrayana también es conocido como Mantrayana y budismo tántrico. Quienes siguen las enseñanzas de esta escuela buscan alcanzar la trascendencia en vida a través de la meditación, principalmente.
4. Budismo tibetano
El budismo tibetano se basa en el Vajrayana. Aunque no es una de las tradiciones más populares en Asia (excepto en Tibet, Mongolia, Bután, India y Nepal), es seguida por muchos budistas occidentales.
El célebre "Dalái Lama" con el que se suele identificar en Occidente al budismo es en realidad un símbolo específico del budismo tibetano. Los lamas son una clase de monjes budistas con influencia económica y política, entre otros aspectos, además de religiosa.
5. Budismo zen
Por último cabe mencionar el budismo zen, que se practica en Japón y en menor medida en otros países cercanos. Como sucede con el budismo tibetano, esta escuela es muy popular en Occidente pero no tanto en Asia, proporcionalmente hablando.
Se trata de una subescuela del Mahayana que enfatiza el papel de la meditación y de la experiencia directa en la obtención del conocimiento. Por contra, da una menor relevancia al pensamiento racional y verbal.
Creencias, principios y filosofía
Las tradiciones budistas comparten una serie de principios y creencias fundamentales propias de esta religión en su conjunto; se distinguen sobre todo en el énfasis que dan a distintos modos de aplicar el Dharma, es decir, de conocer el mundo y fomentar el orden cósmico.
El libro sagrado del budismo es el Tipitaka o Canon Pali, que sirve como base al budismo theravada y en consecuencia también al resto de escuelas, que parten de esta. No obstante, las tradiciones posteriores aportaron otras escrituras adicionales que pueden resultar contradictorias entre ellas al definir los principios budistas.
1. Las Tres Características de la Existencia (Tri-laksana)
Esta enseñanza describe las características del mundo material, el que podemos percibir con los sentidos y que confundimos con la realidad, según el budismo:
Impermanencia (Anitya): todas las cosas, incluida la vida, cambian, decaen y resurgen constantemente; nada es permanente, excepto los seres que alcanzan la liberación (o Nirvana).
Insustancialidad (Anatman): las cosas y los seres vivos no tienen una esencia, por lo que el “yo” y el alma no existen.
Sufrimiento o insatisfacción (Duhkha): este término incluye el dolor que surge de la vida y del transcurso hacia la muerte.
2. Las Cuatro Nobles Verdades
El budismo habla de cuatro principios fundamentales que han sido promovidos por quienes han alcanzado el Nirvana:
El sufrimiento y la insatisfacción (Duhkha) son inevitables.
Samudaya: el Duhka surge de los deseos.
Nirodha: el Duhka desaparece cuando no hay deseos.
Magga: seguir el Noble Camino permite la liberación del Duhkha.
3. El Noble Camino
Se conoce como “Noble Camino Óctuple” a la vía para alcanzar el Nirvana o desaparición del sufrimiento. Estas ocho enseñanzas se agrupan en tres conceptos principales:
Sabiduría (Panna): comprender el mundo y pensar de forma correcta.
Moralidad (Sila): hablar, actuar y ganarse la vida adecuadamente.
Meditación (Samadhi): esforzarse, estar presente y concentrarse del modo correcto al entrenar la mente.
4. Samsara, renacimiento, Nirvana y Karma
“Samsara” es el término que se utiliza en el budismo para describir el ciclo de cambio continuo que estructura la existencia, tanto a nivel individual como cósmico. Todos los seres vivos están inmersos en este ciclo de muerte y renacimiento hasta que alcancen la liberación o Nirvana, que consiste en la adquisición del conocimiento profundo sobre el mundo (la iluminación) y por tanto en el cese del sufrimiento o Duhkha.
Cada renacimiento tiene lugar en uno de los seis reinos del Samsara: el de los dioses o Deva, el de los semidioses o Asura, el de los humanos (reino Manusya), el de los animales (Tiryak-yoni), el de los espíritus hambrientos o Pretas y el infierno, reino de los Naraka. El número y las características de los distintos mundos varían en función de la escuela.
El concepto de Karma (“acción”) hace referencia a la creencia de que las obras, las palabras y los pensamientos tienen consecuencias en una misma vida y en el siguiente renacimiento. Según los principios del budismo, el Karma determina en parte los acontecimientos vitales, la personalidad e incluso la clase social en la que nacemos, entre otros aspectos.