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Tabaco

Beneficios, ventajas y efectos de dejar de fumar tabaco

Los beneficios de dejar de fumar tabaco a corto y largo plazo afectan a la respiración, la circulación, etc.

De entre las causas de muerte que se pueden prevenir, fumar tabaco es la más frecuente a nivel mundial. Esta sustancia aumenta de forma muy significativa el riesgo de sufrir trastornos y accidentes cardiovasculares y respiratorios, además de asociarse a múltiples tipos de cáncer, en especial a los de pulmón, laringe, esófago, páncreas y vejiga.

En consecuencia resulta evidente que romper con esta adicción es muy positivo para nuestra salud física, tanto a corto como a largo plazo. En este artículo describiremos los beneficios de dejar de fumar tabaco, así como los efectos negativos o "síntomas" que suelen producirse a corto plazo durante el proceso de interrupción del consumo, y en general se resuelven en días, semanas o como máximo un mes.

De entre las causas de muerte que se pueden prevenir, el consumo de tabaco es la más frecuente a nivel mundial. Esta sustancia aumenta de forma muy significativa el riesgo de sufrir trastornos y accidentes cardiovasculares y respiratorios, además de asociarse a múltiples tipos de cáncer, en especial a los de pulmón, laringe, esófago, páncreas y vejiga.

Imagen de una cajetilla de tabaco.
El tabaco se asocia a un sinfín de enfermedades | Getty Images

En consecuencia resulta evidente que romper con esta adicción es muy positivo para nuestra salud física, tanto a corto como a largo plazo. En este artículo describiremos los principales efectos beneficiosos de dejar de fumar tabaco, así como las molestias pasajeras que suelen producirse durante el proceso de interrupción del consumo.

Beneficios de dejar de fumar tabaco

A continuación describiremos los principales beneficios de dejar el tabaco a corto plazo y a largo plazo (tras un mes o más sin fumar). Los beneficios físicos se manifiestan en múltiples áreas, relacionadas principalmente con la respiración, la circulación y el riesgo de sufrir trastornos orgánicos severos, como el cáncer. Los beneficios psicológicos de dejar de fumar también son relevantes.

1. Mejora de la circulación sanguínea

Las ventajas de dejar de fumar para el sistema circulatorio se notan enseguida; de hecho, surgen incluso cuando las personas que consumen tabaco llevan un rato sin fumar, puesto que la frecuencia cardiaca y la presión de la sangre se reducen enseguida. No obstante, estas mejoras son más intensas al cabo de unos 3 meses.

2. Incremento de la función respiratoria

Después de 12 horas sin fumar los niveles sanguíneos de monóxido de carbono, que resulta tóxico para el organismo humano en grandes cantidades, pasan a ser equivalentes a los de las personas no fumadoras.

El funcionamiento de los pulmones habrá mejorado mucho a los 3 meses de dejar de fumar tabaco, y a los 9 prácticamente habrán desaparecido síntomas como la tos y las dificultades para respirar; si estos no son muy marcados lo más probable es que el proceso sea más rápido.

3. Recuperación del gusto y del olfato

Es un hecho conocido que el consumo de tabaco provoca déficits en el sentido del olfato y en el del gusto. En este caso la mejora es muy rápida: después de 2 días sin fumar las vías nerviosas asociadas a estos sentidos recuperan su funcionamiento normal.

4. Disminución del riesgo de cáncer

Uno de los principales beneficios de dejar de fumar es que abandonar este hábito reduce el riesgo de sufrir muchos tipos de cáncer. Se ha demostrado que al cabo de 5 años de interrumpir el consumo de tabaco disminuye mucho la probabilidad de desarrollar cáncer de boca, garganta, esófago, vejiga y cérvix, y a los 10 años sucede lo propio con los de pulmón, laringe y páncreas.

5. Descenso de la probabilidad de trastornos cardiacos

Las investigaciones científicas revelan que el riesgo de sufrir enfermedades del corazón se reduce a la mitad al cabo de un año de dejar de fumar tabaco; los fumadores muy habituales pueden tardar unos 15 años en situarse en el mismo nivel de riesgo que quienes no tienen este hábito. De modo similar, la probabilidad de sufrir un infarto desciende hasta los valores normales tras aproximadamente 5 años.

6. Menor incidencia de complicaciones quirúrgicas

Se ha demostrado que una de las ventajas de dejar de fumar es que reduce el riesgo de complicaciones en intervenciones quirúrgicas, particularmente en el periodo postoperatorio. Para que este efecto se produzca la interrupción del consumo debe haberse iniciado unas 4 semanas antes de la operación.

7. Beneficios psicológicos y emocionales

A largo plazo dejar de fumar reduce el estrés, la ansiedad y los síntomas de tipo depresivo. Además las personas que consiguen dejar el tabaco suelen referir sentimientos positivos relacionados con la autoestima y el orgullo de alcanzar esta importante meta, así como con la desaparición de las conductas adictivas y las molestias que comportan.

8. Aumento de la esperanza de vida

De modo sintético, podemos afirmar que cuanto antes dejes de fumar más larga será tu vida. Según sugieren los estudios, las personas que dejan de fumar antes de los 30 años tienen una esperanza de vida muy similar a la de las que nunca han consumido tabaco de forma regular. Esto se asocia con la disminución del riesgo de cáncer y de enfermedades respiratorias y cardiacas.

Efectos negativos a corto plazo

Aunque dejar de fumar tabaco provoca efectos desagradables a corto plazo, la mayoría de los síntomas que mencionaremos desaparecen al cabo de un mes, aproximadamente. Sin embargo, el deseo de fumar suele prolongarse durante 3-8 meses y puede reaparecer de forma puntual ante la presencia de tabaco o en situaciones asociadas a su consumo.

1. Ganancia de peso

Dejar de fumar provoca distintos efectos en el organismo que conducen a un incremento del hambre y a un descenso de la tasa metabólica, factores que favorecen el aumento de peso. Muchas personas ganan entre 4 y 5 kilos los primeros meses después de abandonar el hábito, pero esta ganancia se puede prevenir con ejercicio y hábitos nutricionales saludables.

2. Ansiedad e inquietud

Las personas fumadoras suelen referir un aumento en sus niveles de ansiedad en el periodo posterior a la interrupción del consumo; no obstante, poco a poco la inquietud psicofisiológica se reduce hasta llegar a ser inferior que antes de dejar de fumar, sobre todo en las personas que tenían problemas de ansiedad significativos. Recomendamos el método de la respiración lenta y profunda para manejar estos síntomas.

3. Empeoramiento del estado de ánimo

Durante mucho tiempo se ha defendido que dejar de fumar provoca sentimientos de tristeza, irritabilidad o falta de motivación a corto plazo, lo cual se relacionaría con la desregulación en los niveles de neurotransmisor provocada por la nicotina. No obstante, estudios recientes sugieren que ni la ansiedad ni la tristeza aumentan de forma objetiva al abandonar el tabaco.

4. Dolor de cabeza

Las cefaleas son una consecuencia relativamente habitual de dejar de fumar, si bien no se produce en todas las personas. Cuando estos dolores de cabeza tienen un origen tensional, los ejercicios de relajación, incluyendo los masajes suaves, pueden ser una buena forma de manejarlos y de prevenirlos.

5. Insomnio

Dejar de fumar dificulta la conciliación del sueño y por tanto facilita el desarrollo de problemas de insomnio. Esto se debe fundamentalmente al aumento de los niveles de ansiedad, como hemos mencionado previamente.

6. Tos y goteo nasal

Entre las complicaciones de este tipo destacan el incremento temporal de la tos y del goteo nasal. Se trata de reacciones naturales al abandono del consumo que duran solo unas pocas semanas y que sirven de preludio a una mejora muy significativa de las capacidades respiratorias.

7. Fatiga física y mental

Muchas personas que han dejado de fumar afirman que durante un breve periodo de tiempo se sienten más cansadas, tanto desde un punto de vista físico como cognitivo. Esto se debe probablemente a que el organismo todavía se encuentra sumido en un proceso de adaptación a la ausencia de nicotina, y por tanto debe “aprender” a compensar sus efectos estimulantes.

8. Problemas de concentración

Los síntomas de ansiedad y nerviosismo, las sensaciones de fatiga, el deseo de consumir tabaco y otros efectos a corto plazo de dejar de fumar provocan problemas de concentración y un cierto descenso del rendimiento cognitivo. Como casi todos los demás síntomas, estos déficits raramente se mantienen durante más de un par de semanas.

Referencias bibliográficas:

  • JAMA, 308(15): 15 Strategies to help a smoker who is struggling to quit, Rigotti, N. A. (2012).
  • Mooney, M. E., Johnson, E. O., Breslau, N., Bierut, L. J. & Hatsukami, D. K. (2011). Cigarette smoking reduction and changes in nicotine dependence. Nicotine and Tobacco Research, 13(6): 426-430.