Las últimas tendencias en suplementos alimenticios han colocado a los diferentes tipos de algas en el principal foco de atención ya que, aunque en la antigüedad eran comúnmente utilizadas, durante muchos años han sido ignoradas en la mayor parte del mundo y es ahora cuando se ponen en relieve los posibles beneficios que estas tienen para la salud.
Si bien la más conocida es la espirulina, otra de estas algas es la chlorella, una planta marina rica en nutrientes que, según los estudios, resulta prometedora a la hora de mejorar el colesterol y liberar toxinas. En este artículo descubriremos qué es la chlorella, cuáles son sus principales propiedades y beneficios y también las principales contraindicaciones de esta.
¿Qué es la chlorella? ¿Para qué sirve?
La chlorella es un tipo de alga verde unicelular que crece en aguas dulces y que pertenece a la familia de la chlorophyta. Esta alga posee unos pigmentos fotosintéticos verdes que le otorgan su color característico. Gracias al proceso de fotosíntesis, la chlorella se reproduce y multiplica de manera sorprendentemente rápida, necesitando solamente dióxido de carbono, agua, luz solar y un mínimo aporte de minerales para reproducirse.
Aunque existen más de 30 especies diferentes de chlorella, la investigación se centra en dos tipos principales: la chlorella vulgaris y la chlorella pyrenoidosa. La gran mayoría de estas especies de chlorella, que se pueden encontrar en el mercado de manera habitual, son cultivadas en ciertas regiones Japón y Taiwán.
Tras su cultivo y recolección son procesadas y transformadas para el consumo humano. La chlorella se puede comprar en prácticamente cualquier tienda de productos naturales o parafarmacia y suele ser comercializada en forma de cápsulas, tabletas, polvo o extracto.
Aunque los posibles usos, propiedades y beneficios de la chlorella todavía están siendo estudiados, algunas personas utilizan esta planta como tratamiento preventivo del cáncer, para estimular el sistema inmunitario, aumentar el recuento de glóbulos blancos, proteger al cuerpo de la toxicidad de algunos metales pesados y como antioxidante para ralentizar el proceso de envejecimiento.
Estos son solo unos de los usos que se dan a la chlorella, pero existen otros muchos relacionados con el tratamiento del dolor, la prevención de úlceras, el aumento de la energía y el tratamiento de algunos tipos de erupciones cutáneas, entre otros aspectos.
Propiedades y beneficios de esta alga
Tal y como se comenta anteriormente, a lo largo de la historia a la chlorella se le han atribuido muchas propiedades, pero no todas cuentan con respaldo científico suficiente como para ser consideradas como ciertas.
No obstante, a continuación se enumeran una serie de propiedades y beneficios probados en estudios de laboratorio -al menos en mayor medida que otros de los usos que se suelen dar a esta alga.
1. Es muy nutritiva
La chlorella es considerada como un “superalimento” debido su sorprendente perfil nutricional. Algo similar sucede en el caso de la espirulina, que ha sido recomendada por la Organización Mundial de la Salud como alimento útil para personas en estado de desnutrición.
Aunque el contenido concreto de nutrientes de la chlorella depende de la subespecie, de las condiciones de crecimiento y de su procesado posterior, entre los principales nutrientes se incluyen:
Proteínas (constituyen el 50%-60% del alga)
Contiene los nueve aminoácidos esenciales
Vitamina B12
Hierro
Vitamina C
Antioxidantes
Minerales (magnesio, zinc, cobre, potasio, calcio…)
Ácidos grasos omega-3
2. Favorece la eliminación de toxinas
La chlorella se une a los metales pesados que se encuentran en nuestro organismo y que pueden llegar a resultar tóxicos o perjudiciales y ayuda eliminarlos.
Los metales pesados incluyen algunos elementos que en pequeñas cantidades resultan saludables, pero otros como el cadmio y el plomo pueden llegar a ser tóxicos en grandes cantidades.
Estudios con animales demuestran que ciertas algas, entre las que se incluyen la chlorella, pueden reducir la toxicidad de algunos metales pesados que se almacenan en ciertas partes de nuestro organismo como el hígado, el cerebro y los riñones.
Finalmente, estas evidencias sugieren que la chlorella podría ser muy eficaz a la hora de mejorar la capacidad de nuestro cuerpo para eliminar toxinas.
3. Reduce los niveles de colesterol
Según estudios realizados en personas, dosis diarias de chlorella pueden ayudar a reducir el colesterol de manera significativa.
Además, en personas con presión arterial alta y colesterol ligeramente elevado, se sugiere que esta alga puede reducir de manera significativa el colesterol total y los triglicéridos.
4. Favorece la función del sistema inmune
Nuestro sistema inmune combate las infecciones ayudándonos a mantener nuestro estado de salud. Según los estudios, la chlorella mejora la respuesta de nuestro sistema inmune debido a que aumenta la cantidad de anticuerpos en el organismo.
Los anticuerpos ayudan a combatir los invasores extraños de nuestro cuerpo y, aunque estos estudios todavía se encuentran en vías de desarrollo, suponen un hallazgo muy prometedor.
5. Es un potente antioxidante
Tal y como estamos viendo, la chlorella es una planta con multitud de propiedades. Entre sus muchas cualidades, esta alga contiene compuestos antioxidantes como la vitamina C, la clorofila, el betacaroteno y la luteína.
Los antioxidantes, además de ayudar a mejorar el estado general de nuestro organismo y a ralentizar el envejecimiento de los órganos, pueden ayudar a combatir muchas enfermedades crónicas.
6. Regula la presión arterial
Diferentes investigaciones sugieren que los complementos alimenticios a base de chlorella pueden ayudar a promover la salud del corazón y de los riñones, órganos esenciales para el mantenimiento de unos niveles de presión arterial saludables.
7. Reduce los niveles de azúcar en sangre
Además de todos los beneficios anteriores, las investigaciones en humanos que toman chlorella de manera constante encontraron que, tras varias semanas tomando esta alga, se redujeron los niveles de azúcar en sangre tanto en personas sanas como en aquellas otras con alto riesgo de desarrollar afecciones relacionadas con el estilo de vida -en particular la diabetes mellitus tipo 2.
8. Alivia las enfermedades respiratorias
Existen enfermedades respiratorias como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) en las que uno de los síntomas principales es la inflamación de las vías respiratorias.
Gracias a las propiedades antiinflamatorias de la chlorella, se favorece la disminución de la inflamación y se facilita la respiración en personas con problemas en el aparato respiratorio.
Contraindicaciones y efectos secundarios
Aunque la chlorella parece poseer infinidad de propiedades beneficiosas para el organismo, es cierto que en grandes cantidades o bajo condiciones de salud específicas puede provocar algunos efectos secundarios no deseados.
Tras ser estudiada en numerosas investigaciones y bajo condiciones de experimentación muy variadas, se ha determinado que la chlorella es un elemento posiblemente seguro en la mayoría de los casos -siempre y cuando se administre por vía oral y durante no más de dos meses.
No obstante, entre los principales efectos secundarios de la chlorella se encuentran:
Reacciones alérgicas con problemas respiratorios
Diarrea
Náuseas
Gases
Calambres estomacales
Sensibilidad de la piel al sol