Los bancos españoles acaban de recibir un toque de atención por parte del Gobierno. Hay ciertos asuntos que no acaban de convencerles y ya les han advertido de la necesidad de acometer cambios.
En las últimas horas, la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, volvía a solicitar a estas entidades que incrementarán la remuneración de los depósitos. Mantuvo un encuentro con los presidentes de las principales firmas financieras del país, a los que les reclamó un esfuerzo.
Todo esto se produce solo unos días después de que amenazarán a la banca con mantener el impuesto extraordinario de los beneficios. Calviño recalcó el papel que desempeña el sector financiero para contribuir al "crecimiento de la economía española". Y más en esta época, en un contexto de constante incremento de los tipos de interés.
La propuesta planteada desde el Ejecutivo contempla una "mejora en la remuneración de los depósitos". Pero también una "oferta competitiva de crédito a los hogares y empresas", según difundió el Ministerio en una nota.
Sorpresa con la postura del sector
La postura del Banco Central Europeo de elevar los tipos de interés ha supuesto toda una ventaja para las entidades financieras. Le están sacando un gran rendimiento a esta situación al aumentar el coste de las hipotecas y del resto de préstamos. Sin embargo, esas subidas de los tipos no se han apreciado en los ahorros de los usuarios ni tampoco en los depósitos ofertados.
A comienzos del verano, Calviño aseguró que había realizado un encargo a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Su intención era que se estudiaran los motivos por los que las entidades no incrementaban las remuneraciones de esos productos financieros. Sin embargo, los resultados de ese análisis no se han dado a conocer y tampoco se sabe si se mencionaron en la reunión del lunes.
Desde hace tiempo, la ministra de Asuntos Económicos viene buscando una explicación al comportamiento de los bancos. Apenas ofrecen una rentabilidad a sus clientes cuando tendrían la oportunidad de hacerlo.
A la presidenta de la CNMC, Cani Fernández, también le parecía muy sorprendente lo que estaba ocurriendo. "A mí me cuesta trabajo pensar que no haya un banco que quiera ganar clientes", apunta. Sobre todo "si yo me dedico a captar depósitos para luego así poder prestar dinero".
Le extrañaba que "no quieran aumentar su cuota de mercado, salvo que uno vea que los demás tampoco lo hacen". Durante la presentación de los balances trimestrales y anuales, las principales entidades ya habían dejado entrever sus intenciones.
De momento no contemplaban mejorar sus condiciones. Era algo en lo que coincidían la mayoría. A los clientes, la única opción que les queda pasa por confiar sus ahorros a otras compañías más modestas, pero con unas condiciones más ventajosas.
El mantenimiento del tributo extraordinario
En el encuentro que tuvo lugar este lunes estuvieron presentes los responsables de las principales entidades financieras de nuestro país. Entre ellos, el BBVA, CaixaBank, Santander, Banco Sabadell, Kutxabank, Abanca, Grupo Cajamar, Bankinter e Ibercaja.
Aseguran que dicha reunión "se enmarca en el diálogo constante del Ministerio con el sector financiero". Es más que probable que además de la solicitud del Gobierno por elevar las remuneraciones de los depósitos, también se plantearan otras cuestiones.
Los bancos se encuentran especialmente molestos por la imposición del impuesto extraordinario sobre los beneficios. Iba a tener un carácter temporal, pero tampoco se descarta que se alargue en el tiempo. "En la medida en que haya beneficios habrá que considerarlo", dijo la ministra en la Ser.
Todas las compañías han realizado ya el primer abono, aunque también lo han recurrido. No están conformes con la postura del Ejecutivo y así se lo hicieron saber a Moncloa hace tiempo.