Sorpresa en las gasolineras de todo el país. Contra todo pronóstico, los conductores que se han pasado por las estaciones de servicio en las últimas horas lo han podido comprobar.
Después de tres meses de subidas consecutivas del precio de la gasolina, en las últimas jornadas se nos ha concedido una tregua. Sin embargo, los usuarios de diésel no pueden decir lo mismo, ya que este carburante volvía a experimentar un nuevo incremento.
La gasolina desciende su precio un 0,45% respecto a la anterior semana, alcanzando los 1,752 euros. Hace siete días había alcanzado su techo anual con 1,759 euros, según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Si nos remontamos al mes de julio, que fue cuando empezó el crecimiento, el aumento durante las últimas doce semanas fue del 10%. Por su parte, el diésel se encareció en la última semana un 0,11%, dejando el precio medio en los 1,688 euros por litro.
Estos valores no se registraban desde el pasado mes de enero. Pero lo más preocupante de todo es que la subida de precios alcanzó el 17,3% en los últimos tres meses, publica La Vanguardia.
¿A qué se debe el repunte de los combustibles?
El barril de petróleo ha sufrido un aumento recientemente por el recorte de los productores y el incremento de la demanda en China. Al término de septiembre, el Brent, que sirve de referencia en Europa, llegó a situarse próximo a los 100 dólares. Sin embargo, en la actualidad ronda los 85 dólares.
A partir de julio se daban las circunstancias propicias para que elevaran los precios de los combustibles. Durante el periodo estival se produce una mayor demanda de los carburantes debido al aumento de los desplazamientos por carretera. Algo que es aprovechado por los distintos actores que toman parte en el sector.
Los expertos no son nada optimistas respecto a una posible estabilización de los precios. Sobre todo por la medida adoptada por los países de la OPEP de rebajar el número de barriles a exportar. También influye el conflicto de Ucrania y las restricciones impuestas a Rusia.
¿Cuánto cuesta llenar el depósito?
Las estaciones de servicio concedían una pequeña tregua a los conductores en las últimas horas. Sin embargo, llenar el depósito supondrá hacer un importante esfuerzo económico para la mayoría. Un tanque de 55 litros de gasolina hará que tengamos que desembolsar 96,3 euros.
El año pasado, en esta misma época, nos costaba hasta 15,12 euros menos, es decir, 81,18 euros. Por su parte, si queremos llenar el depósito de diésel el precio a abonar alcanzará los 92,78 euros. A estas alturas de 2022 se situaba en los 88,44 euros.
Es evidente que desde que estallara el conflicto en Ucrania la situación ha dado un vuelco radical en el ámbito de los combustibles. Los precios tanto de la gasolina como del gasóleo se encuentran ya muy consolidados por encima de los niveles que había antes de la guerra.
Si echamos la vista atrás podremos comprobar como la gasolina costaba 1,594 euros el litro en febrero de 2022. En el caso del diésel implicaba un gasto de 1,479 euros.
Hoy en día todavía se mantienen por debajo de la barrera de los 2 euros, que se llegó a alcanzar en julio de 2022. Aquello hizo que el Gobierno tuviera que intervenir y ampliará los periodos de descuento de 20 céntimos hasta finales de año.
Esta posibilidad, a día de hoy, no se contempla. Y mucho menos en la actual situación política, con un ejecutivo en funciones. El único consuelo que le queda a España es saber que el precio medio de los combustibles en nuestro país se encuentra por debajo de la media de la eurozona.