El próximo 11 de abril empieza el plazo hasta el 30 de junio para presentar la Declaración de la Renta. Están obligados a hacerla los contribuyentes que ingresaron más de 22.000 euros en el ejercicio de 2022. Más de 22 millones de españoles a los que la Agencia Tributaria ya está recordando sus obligaciones.
La Declaración de la Renta es el trámite mediante el cual se saldan cuentas con el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Si el contribuyente pagó más impuestos de lo debido, Hacienda le devuelve dinero. Si por el contrario pagó menos de lo establecido, la declaración le sale a devolver.
Según la ley, están obligados a hacerla los trabajadores por cuenta propia o ajena y los pensionistas. Pero también las personas que cobraron aquellas ayudas que están sujetas a fiscalidad como el Ingreso Mínimo Vital (IMV). Hacienda acaba de lanzar un mensaje a estos beneficiarios.
Mensaje de Hacienda a 1,6 millones de españoles
Hacienda lleva a cabo una campaña para recordar a los colectivos que están obligados a hacer la declaración. Entre ellos, los más de 1,6 millones de beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Están obligados a hacer la Declaración de la Renta con independencia de la cuantía de sus ingresos.
Ha sido el propio organismo quien ha recordado en su página web la obligación con el fisco de estas personas. La normativa del IRPF recoge una serie de excepciones entre las que no se encuentra el Ingreso Mínimo Vital. Por lo tanto, quienes cobran esta ayuda tendrán que presentar la declaración.
De hecho, no hacerlo conlleva unas duras sanciones y podrían incluso llegar a perder el derecho a la prestación. Hacienda ha recordado también que presentar la declaración no significa tener que pagar. De hecho, los que cobran esta ayuda y no tienen ningún otro ingreso están exentos del IRPF.
Ingreso Mínimo Vital y Declaración de la Renta
Hacer la Declaración de la Renta no significa tener que pagar, ya que hay algunas rentas exentas de IRPF. Es el ejemplo de este caso, o por ejemplo también el cheque-alimentación de 200 euros. En estos casos, la ayuda se tiene que declarar pero el beneficiario no tiene que pagar si no hay más ingresos.
El beneficiario del IMV solo tiene que declarar por las cantidades que superes los 12.159,42 euros. Esto es, como marca la norma, 1,5 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM). Solo tiene que añadir el resto de rendimientos que perciba, ya que es compatible con el trabajo.
En el caso de que el beneficiario del IMV reciba otras ayudas a colectivos con riesgo de exclusión social, solo tiene que declarar las cantidades superiores a 12.159,42. Esto incluye la renta mínima de inserción y las rentas garantizadas. Así como las ayudas similares de las comunidades autónomas y ayuntamientos.
Otras cosas a tener en cuenta
La Agencia Tributaria prevé que la gran mayoría de declaraciones de estas personas serán muy sencillas y sin ingresos que declarar. “En muchos casos la cuota será cero”, apunta la administración, “sin ingresar ni devolver”. Si la persona no ha obtenido ninguna otra renta, la declaración quedará en importe cero.
El problema será para aquellas personas que no hagan la declaración, y que tendrán una sanción pudiendo perder la ayuda. El martes 11 de abril se abre el plazo para presentar el borrador de forma telemática. A partir del 5 de mayo se podrá hacer por teléfono, pidiendo cita previa.
Para hacer la declaración de manera presencial, se podrá hacer a partir del 1 de junio. Se podrá pedir cita previa a partir del 25 de mayo, y los contribuyentes tendrán hasta el 30 de mayo para hacer la declaración.