No engordar se ha convertido en una de las principales preocupaciones de mucha gente que, durante la cuarentena, está cayendo en la irresistible tentación de ir de la nevera al sofá, y del sofá a la nevera. Todo empieza por los hábitos alimentarios, y uno de los consejos más útiles es vigilar lo que desayunamos para evitar engordardurante el confinamiento.
El desayuno más sano es el que contiene proteínas, ácidos grasos, fibra, vitaminas y minerales, sin superar el 25% de las necesidades diarias de calorías. Entre los alimentos que deben estar en el desayuno se encuentran los cereales integrales, las bebidas vegetales, los frutos secos, la fruta de temporada, las semillas y los jugos naturales. Pero, ¿qué cosas no debes comer en el desayuno?
Hidratos de carbono refinados
Según un estudio publicado por el The American Journal of Clinical Nutrition, a largo plazo el pan blanco, la bollería, la pastelería, los cereales industriales y otros hidratos de carbono refinados pueden contribuir a la obesidad y la diabetes. Además, causan picos de glucemia que hacen que acumules grasa y vuelvas a estar hambriento al cabo de poco rato.
Azúcar blanco
Otro de los ingredientes que debes limitar al máximo en los desayunos es el azúcar blanco y el exceso en general de azúcares, ya que según varios estudios científicos el alto consumo de este producto favorece el riesgo de obesidad y trastornos en el metabolismo. A menos azúcares, más salud, y más contribución a mantener la línea.
Lácteos
Los productos lácteos en pequeñas dosis no son perjudiciales, siempre que no tengas intolerancia a la lactosa. De hecho, el Food and Nutrition Research publicó un estudio según el cual este tipo de productos como leche, yogures, queso y otros derivados protegen contra las enfermedades crónicas. Pero al incluirlos en el desayuno puede rebasar las cantidades recomendadas y es uno de las principales causas de poner kilos de más.
Productos ultraprocesados
Los embutidos, las frituras, los enlatados, la bollería y otros productos ultraprocesados entran dentro de la alerta roja de cosas a evitar en el desayuno. No solo son perjudiciales para tu salud, ya que contienen químicos que rompen con el concepto de dieta sana y equilibrada, sino que también poseen grandes cantidades de azúcares y grasas trans que te hacen engordar.
Harina blanca o refinada
La harina blanca o refinada carece de fibras y nutrientes y esto hace que no sea una buena opción para incluir en tu menú del desayuno. El consumo de este tipo de harina causa un subidón instantáneo de glucosa que tu organismo, al no necesitar esos niveles de energía en el momento, almacena en forma de grasa. Resultado: en cuestión de poco tiempo volverás a tener hambre y acumularás reservas de grasa en tu cuerpo.