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Colon irritable

Los nutricionistas advierten de que estos 20 conocidos alimentos irritan el colon

Conoce todos aquellos alimentos que son perjudiciales para el colon

La aparición de afecciones no siempre es consecuencia de nuestros actos. Sin embargo, en lo que se refiere a las molestias gastrointestinales, muchas veces nuestros hábitos alimentarios tienen mucho que ver con su aparición.

Por ello, lo más recomendable es reconocer qué tipos de alimentos son negativos para el correcto funcionamiento de tu sistema digestivo. De este modo, los podrás eliminar y así disminuir la posibilidad de padecer molestias estomacales.

¿Por qué debemos cuidar nuestra salud intestinal?

Aunque nos ocuparemos sobre el colon más adelante, es necesario tener en cuenta algunos aspectos importantes relacionados con nuestra salud intestinal (y sus importantes funciones).

El intestino delgado participa en la digestión y absorción de los alimentos. Y el papel principal del intestino grueso es en la absorción de agua y sales y la formación de heces. Debido a su función, la superficie de los intestinos es muy grande. 

Persona tocándose la barriga con dolor
Nuestra salud intestinal depende de muchos factores | Getty Images

Consisten en un tejido esponjoso que permite la absorción de sustancias desde el intestino hacia el cuerpo y el torrente sanguíneo. Y, desde allí, pasa a los distintos órganos del cuerpo.

En realidad, nuestro intestino delgado es un tubo de varios metros de largo, donde se dirigieren azúcares, grasas, proteínas, vitaminas y minerales. En este sentido, ¿sabías que algunas sustancias se absorben en lugares específicos? Es lo que ocurre con la vitamina B12, que solo es absorbida en el tramo final del intestino delgado.

Nuestros intestinos contienen alrededor de 400 tipos diferentes de bacterias, muchas de las cuales se consideran bacterias buenas. Esto se debe principalmente a que son necesarias para el buen funcionamiento del sistema digestivo.

¿Qué es el colon irritable?

Estómago sensible, dolor, sensación de hinchazón, gases, malestar, alteraciones en la frecuencia de las deposiciones y empeoramiento de todos estos en situaciones de estrés o estrés…

El colon irritable, también conocido como síndrome de intestino irritable, es causada por diferentes alteraciones en el movimiento de los intestinos. Estos trastornos tienden a provocar una serie de síntomas perturbadores, que ocasionan mucho malestar.

En realidad se trata de un síndrome muy común. De hecho, se estima que una de cada cinco a diez personas lo padece. Es más, es más habitual entre las mujeres y aparece por primera vez en la mayoría de los casos entre adultos jóvenes. 

¿Qué alimentos pueden irritar nuestro colon?

En verdad existe toda una larga lista de alimentos que pueden no ser adecuados cuando sufrimos de colon irritable, ya que pueden influir aún más en su irritación. Es el caso de los alimentos ricos en hidratos de carbono, puesto que tienden a ser más difíciles de asimilar por parte de nuestro organismo.

Los alimentos ricos en fibra tampoco son muy adecuados, porque hace que nuestro colon tienda a trabajar mucho más. Los alimentos o productos alimenticios con alto contenido en azúcares tampoco son recomendaciones, al igual que los edulcorantes artificiales.

Por otro lado, debemos evitar el consumo de alimentos con alto contenido en grasas. Así como alimentos muy ricos en especias o condimentos. No obstante, existe una lista de 20 alimentos que no serían recomendables en absoluto, porque influyen de forma muy negativa en este sentido.

Diferentes coles junto a recipientes con col troceada
Es recomendable no abusar de alimentos como las coles | Getty Images

Son los siguientes: ajo, brócoli, café, carne roja, chocolate, col, coles de Bruselas, edulcorantes, embutidos, espárragos, garbanzos, germen de trigo, pasta, guisantes, judías, lentejas, refrescos, té verde, verduras crudas y las bebidas alcohólicas.

¿Qué podemos hacer para cuidar nuestro colon irritable?

El tratamiento nutricional es imprescindible. Aunque hay que tener en cuenta que no hay pautas integrales para todos los pacientes. Se recomienda hacer comidas regulares cada 2 a 3 horas y no saltarse las comidas. También se debe comer despacio y masticar muy bien los alimentos. Lo más aconsejable, por tanto, es acudir a un nutricionista para que nos asesore.