Los conductores ya se ponen en lo peor con las últimas noticias que difunden las compañías de carburantes. El cambio de año implicará una serie de modificaciones en Repsol, Cepsa y BP que afectará de manera importante a los conductores. En cuestión de unos pocos días lo podrán comprobar en sus bolsillos.
Hay mucha expectación por conocer la decisión del Gobierno respecto a la bonificación de los 20 céntimos por litro. Todo hace indicar que la suprimirán y que únicamente la mantendrán para una serie de determinados colectivos. En cualquier caso, la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicios (CEEES) denuncia la "inconcreción" sobre esta ayuda.
Sospecha que esto condena al sector y a los ciudadanos a una situación de "caos, colas y desabastecimiento". Pero más allá de la eliminación del descuento de los 20 céntimos, también advierten de una reforma legal que permitirá el encarecimiento de los combustibles. A lo largo de 2023 podría subir el precio del diésel 27 céntimos por litro y la gasolina otros 15.
Esta organización se muestra un tanto preocupada por la falta de noticias por parte del Ministerio de Hacienda. Nadie ha contactado con ellos para desvelar en qué situación quedan a partir de enero.
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Nuevo encarecimiento de los carburantes
Indican que hay un "nuevo marco normativo" que facilitará el encarecimiento "aún más de los carburantes" a partir de enero. Con la entrada del nuevo año empezará a aplicarse la Directiva de Calidad de Carburantes. En virtud de esta norma, el litro de combustible elevará su precio entre 3 y 6 céntimos.
En nuestro país, a diferencia de otros territorios de nuestro entorno, los biocarburantes "soportan una fiscalidad incluso más alta que los combustibles de origen fósil". Pero existen otras iniciativas legislativas que elevarían todavía más el coste de los combustibles.
El Fondo Nacional de Sostenibilidad del Sistema Eléctrico permanece en tramitación parlamentaria. En el caso de sacarse adelante, el precio de los carburantes sufriría otro repunte de hasta 7 céntimos por litro.
También hacen hincapié en la necesidad de igualar fiscalmente al gasóleo respecto a la gasolina. De llevarse a cabo esto, el diésel vería aumentado su precio otros 11,5 céntimos. Además, los expertos escogidos por Hacienda proponen elevar la fiscalidad de los hidrocarburos otros 5,4 céntimos, añaden.
¿De cuánto sería la subida de los combustibles?
De cumplirse con todo esto, el bolsillo de los conductores se vería muy resentido. El Gobierno aún no ha confirmado nada, pero la confederación de estaciones de servicio se teme lo peor con vistas a enero. "Nos enfrentamos a aumentos de impuestos", algunos de los cuales ya están aprobados y otros permanecen en estudio.
Con todo esto, el incremento de la gasolina sería de 15 céntimos por litro como mínimo, mientras que el diésel alcanzaría los 27. Lamentan que todo esto les esté pasando factura también a ellos. En los últimos ejercicios ha caído mucho la demanda de los combustibles.
Las ventas continúan un 4,6% por debajo de las de 2021, pero suponen un 10% menos en comparación con las cifras de 2019. Así lo recoge el avance de consumo realizado por Cores en octubre.
Señalan que "pese a ese menor consumo", el precio de los carburantes resulta "inasumiblemente elevado" para particulares y empresas. Respecto a hace un año, la gasolina está un 7,5% más cara, mientras que el gasóleo presenta un precio un 24% superior.
Destacan que todo esto tiene lugar en "un contexto de máxima volatilidad". Nos encontramos en una época con "recortes de la producción hasta finales de 2023", a lo que se le suma "el invierno llegando a Europa". También recalcan que China esta "despertando de su letargo tras la desaparición de la política de cero Covid".