Esta semana, la primera del otoño, estará marcada por la entrada de frentes atlánticos, que afectarán principalmente al noroeste de la península. El primero de estos frentes, que alcanzará Galicia el miércoles, se anticipa como el más activo, cruzando la península el jueves mientras pierde fuerza.
Se prevé que las lluvias sean particularmente intensas en el oeste de Galicia, donde podrían acumular más de 100 mm durante todo el día. Este fenómeno se debe al desplazamiento del anticiclón de las Azores hacia el sur, permitiendo la entrada de sistemas de baja presión. Estos sistemas llegarán acompañados de chubascos y tormentas.
En estas comunidades caerá mucha lluvia esta semana
Este martes podríamos decir que tendremos un día de transición. No significa que no vaya a llover en algunos puntos, pero es poco probable que se acumulen grandes cantidades de lluvia. Todo ello a la espera del miércoles, cuando el frente principal incrementando la probabilidad de lluvias en amplias zonas de la península.
Galicia se llevará la peor parte, con lluvias persistentes que podrían convertirse en torrenciales, especialmente en su fachada atlántica. De todas formas, las precipitaciones también afectarán con intensidad a Asturias, el noroeste de Castilla y León, Navarra, Aragón y Extremadura. En todas estas comunidades acumularán entre 50 y 70 mm entre hoy y el jueves.
El tiempo en los próximos días
Conforme las lluvias avancen hacia el cuadrante noroeste, se irán extendiendo a otras regiones, incluyendo los Pirineos y el centro del país, como Madrid. A lo largo del jueves, este frente cruzará la península, aunque ya debilitado, dejando atrás un panorama más inestable. Tras la jornada del jueves, es posible que la estabilidad atmosférica empiece a afianzarse.
El anticiclón podría regresar a su posición habitual al oeste de la península, lo que permitiría un respiro en las precipitaciones. Aunque el viernes y, en menor medida, el sábado, aún podrían registrarse lluvias en el extremo norte.
En definitiva, el tiempo de esta semana pasará a una actividad típica del otoño, con lluvias frecuentes y temperaturas en descenso. Todo ello nos indica que ya hemos dejado el verano atrás y que ya toca hacer el cambio de armario. A la espera, claro está, del invierno, que muchos meteorólogos avisan que no será igual que el de los últimos años.