A continuación vamos a hacer una breve revisión de qué son los videojuegos, cuál es su historia, qué tipos hay, en qué consiste la adicción a esta forma de ocio, cuáles son sus beneficios desde un punto de vista psicológico y, en resumen, qué posibles ventajas y desventajas pueden ofrecer los videojuegos a sus usuarios.
¿Qué son los videojuegos? Historia y tipos
Dada la gran variedad de formatos de videojuegos que existen en la actualidad, resulta difícil definir este modo de entretenimiento más allá de decir que se trata de un tipo de juego que requiere un soporte electrónico, incluyendo de forma clave imágenes en vídeo (si bien, por ejemplo, un videojuego diseñado específicamente para personas invidentes no emplearía este componente).
Para jugar a videojuegos es necesario contar con una plataforma determinada, y con frecuencia también con un controlador, como un mando o un joystick. Aunque tradicionalmente el soporte de juego han sido videoconsolas como las célebres PlayStation o GameBoy, el inicio de la historia de los videojuegos se asocia a las máquinas arcade, mientras que los ordenadores y más recientemente los teléfonos móviles han ido ganando relevancia como plataformas alternativas.
Los primeros videojuegos surgieron a partir de avances tecnológicos en otras áreas; por ejemplo, en el año 1948 apareció Tennis for two, una versión del ping-pong basada en las pantallas de los radares que daría lugar a Pong en 1972. La aparición de las máquinas arcade, que funcionaban con monedas, supuso la toma de contacto del gran público con esta forma de ocio.
Existen muchos tipos (o géneros) de videojuegos; algunos ejemplos son los shooter (“de disparos”), los juegos de rol o RPG (basados en el formato Dungeons & Dragons), los de estrategia, los de terror, los de defensa de torres (como el popular Clash Royale), los educativos o los de ejercicio. Por otra parte encontramos los videojuegos basados en la realidad aumentada y en la realidad virtual, que con toda probabilidad estarán muy extendidos en unos años.
El progreso de la industria de los videojuegos en las últimas décadas y la investigación de carácter científico en torno a este medio han favorecido la aparición de juegos con beneficios psicológicos evidentes para niños y adultos -y diseñados específicamente con el fin de ayudar al usuario en algún aspecto, como es el caso de Brain Training y las funciones cognitivas.
Beneficios y ventajas de jugar (psicológicas y físicas)
En primer lugar, jugar a videojuegos puede ser muy placentero; este factor es muy relevante y no hay que obviarlo. Más allá de esto, en función de la forma en que haya que jugar, un videojuego puede ser útil para relajarse y disminuir el nivel de estrés, para alcanzar un estado agradable de concentración, para liberar tensiones y, en algunos casos, como sucede con los libros o las películas, para sentir emociones intensas e incluso catárticas.
Según algunos estudios (por ejemplo Green y Bavelier, 2003), jugar a videojuegos de acción mejora la coordinación entre los ojos y las manos, la resistencia a la distracción y la percepción visual en general. De modo más amplio, la American Psychological Association ha confirmado que algunos tipos de videojuegos mejoran la destreza y la resolución de problemas.
Así, las ventajas de los videojuegos dependen del tipo de juego que se practique. Por ejemplo, hay juegos educativos desde hace muchos años, se han estudiado los beneficios de los videojuegos cooperativos en cómo se relacionan los niños en la escuela y, como hemos dicho, existen juegos diseñados de forma específica para ejercitar la memoria, la atención y otros procesos cognitivos que han resultado populares entre personas mayores.
Posibles desventajas: la adicción a los videojuegos
Según muchas personas, la principal desventaja de jugar a videojuegos es el riesgo de adicción. No obstante, en la actualidad no existe suficiente apoyo en la comunidad científica como para afirmar que este tipo de adicción constituya un trastorno diferenciado del juego patológico, que sí está recogido en los manuales diagnósticos como el DSM.
Por el momento los datos disponibles no permiten confirmar las acusaciones que se han hecho a los videojuegos -tanto en relación a las supuestas consecuencias negativas a nivel psicológico de jugar mucho como a las de la exposición a la violencia típica de muchos juegos.
En todo caso, tal y como revela un metaanálisis de Ferguson y colaboradores (2011), la adicción a los videojuegos parece ser la consecuencia de otros problemas subyacentes más que la causa de síntomas psicológicos. Por ejemplo, es más probable que una persona adolescente se vuelva adicta a un videojuego si tiene dificultades para relacionarse con sus iguales.
Resulta innegable, por otro lado, que la adicción a los videojuegos puede ser muy perjudicial para la salud en el sentido de que implica con gran probabilidad una ausencia de ejercicio físico. El estilo de vida sedentario promueve un gran número de problemas de salud y enfermedades, en particular cuando se asocia con una dieta inadecuada.
Referencias bibliográficas:
Ferguson, C. J., Coulson, M. & Barnett Griffiths, J. (2011). Video game addiction. Journal of Psychiatric Research, 45(12): 1573-1576.
Green, C. S. & Bavelier, D. (2003). Action video game modifies visual selective attention. Nature, 423(6939): 534–537.
American Psychological Association (11 de agosto de 2008). Playing video games offers learning across life span. Newswise. Recuperado el 7 de mayo de 2018 de http://www.newswise.com//articles/view/543366/