Prevalece una visión pesimista sobre la tendencia en alza del precio en los productos alimenticios. Llenar una buena cesta de la compra y ahorrar parecen dos hechos incompatibles. Pese al esfuerzo económico que emplean muchas familias, ir al supermercado se ha convertido en toda una odisea.
Y como es lógico, ante este escenario de lo más complicado, los consumidores han descubierto un método que permitiría ahorrarnos unos céntimos del importe total. Empleado en otros países como Estados Unidos, esta alternativa podría permitir descansar la economía de muchas familias.
El nuevo método para ahorrar en la compra
Según los datos analizados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), prácticamente el 95% de los productos de los supermercados se ha visto encarecido en un 15,2%. Una cifra que se sitúa en la peor de estos últimos 34 años, por lo que hacer la compra ahora es más complicado que en las últimas décadas.
Por ello, se está empezando a popularizar el empleo de cupones de descuento. Pese a no ser muy conocidos en España, portales de marketing señalan que los sites de cupones de descuento estarían recibiendo una importante cantidad de visitas y descargas.
Un hecho que se ve justificado en la alta inflación en los precios, así como el trabajo conjunto entre compañías y este tipo de portales. Al ser un descuento inmediato, el uso de cupones no requieren ninguna dificultad.
"Son muchas las marcas de gran consumo que están reforzando su actividad promocional a través de cupones con el fin de ayudar a los consumidores en este momento", afirmaba Cristina Davis, la directora de ventas de savi, para 20 minutos.
Pese al aumento del uso de estos cupones, se debe tener en cuenta que no todos los establecimientos están obligados a aceptarlos. Lo más recomendable es consultar en cada uno de ellos
¿En qué consiste el uso de estos cupones?
El uso de estos cupones permite que los consumidores puedan hacerse con productos a un precio inferior al inicial. Son empleados, sobre todo, para productos de alimentación de primeras marcas.
Algunos establecimientos como perfumerías o farmacias también los acepten. Así, los usuarios pueden hacerse con productos para la higiene personal o productos de limpieza a un precio algo rebajado.
Para hacerte con ellos, puedes optar por la opción más clásica: los cupones de papel, o la opción más moderna: los portales de internet. En el primer caso, tan solo tendrás que consultar revistas o periódicos.
En el segundo caso, deberás centrar tu búsqueda en páginas como Tiendeo o Ahorradoras, portales en los que se pueden consultar distintos catálogos y ofertas. En ellos podrás hacerte con descuentos de menor o mayor importe. La mayoría de ellos tienen una fecha de caducidad, por lo que deberás estar atento si les quieres dar uso.
Otra interesante opción es la que ofrecen algunos supermercados. En Carrefour, por ejemplo, los usuarios reciben diversos cupones, tanto de forma presencial como en la aplicación del supermercado, al comprar.
La fiebre por los cupones, muy común en Estados Unidos
El couponing cuenta con numerosos adeptos en otros países, pero reúne casi todos sus fanáticos en Estados Unidos. Aceptada como una estrategia para ahorrar dinero, se calcula que más de la mitad de su población la emplea, al menos, una vez por semana.
Es tal el impacto que tiene este fenómeno en la sociedad, que ya se le han dedicados reality shows sobre personas expertas en este método de ahorro. Y aunque no todos los cupones tengan una gran huella sobre el importe total, se calcula que el estadounidense promedio se ahorra un 12% del coste de la cesta al año.
Una cifra que suena de lo más interesante, si tenemos en cuenta que, en España, alimentos como el aceite de girasol han sufrido un aumento del 118% o un 75% en el caso de las magdalenas y las margarinas sobre su precio anterior.