Repsol y Cepsa han hecho saltar todas las alarmas. Los responsables de las dos entidades le trasladaron al presidente de Gobierno su preocupación por lo que sucederá en cuestión de unas semanas. Se avecinan malas noticias para los conductores.
Al parecer, a partir de febrero se espera una subida del precio del gasóleo a nivel internacional. Esto estará motivado por la prohibición de las importaciones de Rusia.
Pedro Sánchez recibió esta respuesta por parte de Josu Jon Imaz, de Repsol, y de Maarten Wetselaar, de Cepsa. Mantuvieron un encuentro el pasado martes en donde el líder socialista trató de conocer las perspectivas del sector. Pero la respuesta que recibió no debió de sorprenderle en exceso.
Las dos empresas son conscientes de la necesidad de sancionar a Rusia por la invasión a Ucrania. Sin embargo, las medidas internacionales de vetar el gasóleo ruso implicará un serio contratiempo para el precio de los carburantes.
Se esperan novedades en las gasolineras
No es del todo seguro que se vayan a producir grandes variaciones en el precio de los combustibles en España. Sin embargo, sí que advirtieron de la volatilidad internacional del gasóleo, recoge El Mundo. A partir del 5 de febrero entrará en vigor la prohibición de todos los productos petrolíferos de Rusia.
La medida fue adoptada el pasado mes de junio por la Unión Europea. Entendían que era una manera dura de castigar a Putin. Para que no se desatara una tormenta en el mercado que incrementará aún más la inflación decidieron que la respuesta fuera gradual.
En diciembre decidieron prohibir la compra de crudo ruso y a partir del 5 de febrero harían lo propio con los derivados del petróleo. Ante la situación que se avecinaba, fueron muchos los operadores internacionales que han ido haciendo acopio durante los últimos meses. Querían estar preparados para cuando llegará este momento.
La Agencia Internacional de la Energía desveló que las exportaciones de gasóleo ruso registraron cifras récord en las últimas semanas. La mayoría de este combustible fue a parar a la Unión Europea. Además, también se aprecia un aumento de las importaciones de gasóleo de China, que es la gran alternativa que se encuentran las empresas del sector.
Avisan de problemas de suministro
Analistas del mercado energéticos coinciden en que habrá un cierto tensionamiento en el sector. Se producirá a causa de los problemas de suministro en algunos puntos de Europa.
Los responsables de Repsol y Cepsa descartaron que vaya a haber carencia en nuestro país. Pero sí que auguran una cierta incertidumbre en torno al gasóleo en un plazo de tiempo corto. Creen que este impacto no se dejará notar a comienzos de febrero por la planificación de almacenamiento, pero sí más adelante.
Al prohibir el gasóleo de Rusia, la Unión Europea pierde a uno de sus grandes suministradores. No hay que olvidar que la tendencia de este territorio en las últimas décadas ha sido la de reducir su capacidad de producción.
Las principales compañías petrolíferas españolas son incapaces de precisar cómo afectará esto a las gasolineras. Todo dependerá de una serie de factores. Entre ellos la dureza del invierno y la demanda.
¿Qué supone prescindir del gasóleo de Rusia?
Dejar de lado el gasóleo ruso supone una noticia muy negativa para el mercado energético. Hasta la fecha, la mitad del diésel que llegaba a la Unión Europea procedía de este país. Este veto ha supuesto una decisión muy dura para los gobiernos europeos, conscientes de lo que implicará. No hay que pasar por alto que más del 90% de los camiones y furgonetas funcionan con este tipo de combustible. A ello se le unen el 42% de los automóviles.