Un reportero de Cuatro, Adam Salvia, vivió un momento inesperado en pleno directo. Como suele ser habitual en ocasiones, la presencia de espontáneos puede alterar por completo el trabajo de los profesionales de la comunicación.
Los hechos ocurrieron hace unos días, y el operador de cámara, Carlos Hernández, se encargó de compartirlo en sus redes sociales. El periodista se encontraba en la calle abordando el tema del consumo de agua en los campos de golf de nuestro país.
Desde el plató de Cuatro al día se le dio paso y arrancó su pieza analizando la situación que existe en estos momentos. "En España hay aproximadamente unos 430 campos de golf", explicaba. Pretendía hacer ver a la gente el enorme gasto y la gran cantidad de agua que exigen estos espacios.
En ese instante fue cuando apareció por detrás de él un viandante. Permaneció durante unos cuantos segundos casi en paralelo al profesional, al tiempo que miraba fijamente a la cámara. Daba la impresión de que quería convertirse en el protagonista de la crónica y así lo consiguió.
En redes sociales le llovieron las críticas al señor por "la falta de respeto". Por impedir que un reportero hiciera su labor en las mejores condiciones posibles, recoge el portal Huffington Post. En apenas unos minutos, el vídeo se hizo viral y en dos horas ya contaba con casi 200.000 reproducciones en TikTok.
El espontáneo valoró su buen trabajo
Una vez que concluyó la conexión en directo, el espontáneo valoró con un fuerte aplauso el buen trabajo de los comunicadores. Al tiempo que decía "toma buena". Mientras se iba del lugar trataba de disculparse por su comportamiento con un "sorry".
Tanto el periodista como el operador de cámara mantuvieron en todo momento el tipo y en ningún momento le reprocharon su actitud. Por lo que se puede extraer de la conversación que mantuvieron, es probable que pensara que se trataba de una simple entradilla para una información. Pero en realidad estaba ante una conexión en directo, por lo que ya no había posibilidad de cortes ni de nuevas grabaciones.
"Te ha visto media España haciéndolo", apuntó Carlos Hernández, una vez que finalizó su trabajo. Le solicitaba a su compañero Adam que le explicara cómo había soportado aquella aparición mientras hablaba delante de la cámara.
El reportero se mantuvo durante los segundos de la conexión con mucha tranquilidad, sin realizar ningún tipo de gesto. "Veía una presencia y a ti hacer un gesto, pero no sabía si era a mí o a él", indicó con una sonrisa. Después de todo lo ocurrido consiguió sacar adelante su trabajo de la mejor manera posible.
Sensación de enfado y de risas
El operador de cámara tampoco era capaz de explicarse lo sucedido. Afirmaba ante su compañero que tenía una cierta sensación de "cabreo", pero también le estaba costando "no reírme". Entendía que era una reacción lógica en una situación de nervios y de tensión.
Trataban de hacer su trabajo lo mejor posible y lo consiguieron pese a la presencia de este desconocido. "Creía que sentías la respiración", porque lo tenía prácticamente a escasos centímetros de él. En cualquier caso, le mostró toda su admiración por su gran labor: "Alucino con que hayas estado tan bien", confesó
Carlos Hernández contaba en su cuenta de Instagram que "esta vez no era una broma. Lo que nos ha pasado en directo refleja las muchas situaciones que vivimos con gente que nos interrumpe cuando estamos trabajando".
Las respuestas que recibían eran de ánimo. Poniendo en valor el aguante y la profesionalidad demostrada pese a las dificultades. "Me pasa a mí, y le falta ciudad para correr", le contentó una internauta.