Todos hemos lavado los platos alguna vez. Pero secarlos puede ser aún más engorroso. Eso sí, si para hacerlo utilizas el paño de cocina más cercano, debes saber que esta acción debe evitarse en el futuro, y se trata de un completo error.
A primera vista, te dices a ti mismo que no tiene nada de malo secar los platos con uno o varios paños de cocina. En este caso, en lugar de dejar que tus cubiertos se sequen tranquilamente al aire libre, te apresuras a limpiarlos con el primer paño de cocina que veas, solo para volver a poner todo en orden lo antes posible y retomar tus actividades habituales. Si bien es cierto que los paños de cocina no presentan ningún riesgo a primera vista, pueden ser auténticos caldos de cultivo para las bacterias.
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¿Por qué no debemos usar paños de cocina para secar los platos?
Probablemente no lo sepas, pero los paños de cocina pueden contener bacterias peligrosas. De hecho, este último puede acumular las bacterias presentes en las manos, el fregadero, el plan de trabajo y los platos sucios.
Una vez húmedo, el paño de cocina se convierte en un caldo de cultivo para el crecimiento de microbios. Peor aún, algunas personas tienen la molesta costumbre de limpiarse las manos con el paño de cocina que también se usa para secar los platos.
Además, según el estudio realizado por la Sociedad Estadounidense de Microbiología, esta última reveló que los paños de cocina pueden albergar patógenos que pueden provocar intoxicaciones alimentarias.
En ese estudio, en el que analizaron 100 paños de cocina de 100 familias distintas durante un mes, el 49% de ellos eran auténticos criaderos de bacterias, algunas de las cuales representaban riesgos para la salud. Es más, el 36,7% de ellas habían desarrollado bacterias coliformes, del tipo E.Coli, que provoca gastroenteritis. Mientras que también se encontraron enterococos en heces.
¿Cómo secar platos y cubiertos sin usar un paño de cocina?
Si te preguntas cuál es la mejor manera de secar los platos, es una buena idea dejar que los cubiertos se sequen al aire en una rejilla. Es, por tanto, la forma más eficaz de evitar la transmisión de gérmenes de una superficie a otra.
Eso sí, antes de lavar tus cubiertos, asegúrate primero de deshacerte de todos los restos de comida y no dudes, al mismo tiempo, en limpiar y desinfectar bien el fregadero para que no se contamine con ninguna bacteria.
Como puedes ver, lavar bien los platos no servirá de mucho si no te acuerdas de secarlos correctamente. No es necesario usar una toalla de cocina o una toalla de papel, simplemente deja que tus cubiertos se sequen al aire en un escurreplatos para evitar cualquier riesgo de contaminación bacteriana.
Y es que, para ser más precisos, los cubiertos no deben secarse. Para secar, basta con dejar al aire libre antes de guardar. Y es por eso que necesitas tener un escurreplatos.
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Pero, si tienes prisas, en este caso lo mejor es usar servilletas de papel de un solo uso, lo que ayudará a evitar que se generen bacterias y que estas, además, impregnen cualquier cosa que toquemos. También es aconsejable cambiar los paños de cocina idealmente todos los días, justo antes de cocinar. Y, preferiblemente, tratar siempre de usar servilletas de un único uso.
Por tanto, recuerda lo esencial: antes de usar paños de cocina para secar los platos, trata de utilizar papel absorbente de un solo uso. Por último, trata de cambiar los paños de cocina a diario, incluso aunque no los uses para secar la vajilla.