¿Te has planteado vender tus joyas? Entonces te interesará saber que el precio del oro ha marcado, este año, su récord histórico; por lo que podría ser un buen momento para hacerlo. No obstante, debes tener cuidado, pues no todos los comercios operan legalmente.
Para muchos llegar a fin de mes resulta complicado durante todo el año, y aún más en estos tiempos que corren. La gran inflación y los elevados precios de la electricidad hacen de estos últimos meses una auténtica cuesta arriba para bastantes familias.
Y ya se sabe, cuando la necesidad aprieta se buscan todo tipo de soluciones, aunque en algunos casos impliquen el tener que desprenderse de joyas y objetos preciados.
Vender oro: una de las opciones más beneficiosas
El oro es considerado uno de los activos que mejor conserva su valor en el tiempo. Y, solo eso, si no que su precio no ha parado de crecer en los últimos años, convirtiendo este negocio en uno de los más beneficiosos.
La situación de crisis actual está provocando que el coste del oro no deje de subir consiguiendo máximos históricos. De hecho, el punto más elevado se alcanzó el pasado mes de marzo de 2022, lo que también repercute en la proliferación de las empresas en el sector.
De la misma manera, cada vez son más las personas que, ante una circunstancia económica complicada, deciden vender sus alhajas para hacer frente al pago de una deuda o simplemente para llegar a fin de mes. Sin embargo, estos trámites no siempre salen como uno se espera.
Lo que debes tener en cuenta a la hora de vender oro
Según se ha podido comprobar, no todos los locales de compra-venta de oro operan con total transparencia. Existen establecimientos que no son de fiar y utilizan el desconocimiento de sus clientes para estafarlos.
Por dicho motivo, en caso de tratar con este tipo de empresas, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
1. Compruebe la licencia del local
En primer lugar, debe comprobar que el establecimiento dispone de licencia municipal de apertura y Hojas de Quejas y Reclamaciones a disposición del usuario que las solicite, así como del cartel anunciador de las mismas.
2. Revise los precios de venta expuestos
Así mismo, es importante que observe que todos los precios de venta están expuestos, así como el precio por unidad de medida.
3. Balanzas en reglamento
Las balanzas tienen que cumplir con la normativa al respecto. Para comprobarlo, puede fijarse en la etiqueta de verificación periódica o el plazo de validez de la máquina. Solicite que el pesaje se realice siempre en su presencia para que pueda ver el instrumento de medida y constatar que se realiza con exactitud.
4. Presta atención a la publicidad
No se deje llevar por la publicidad insistente que realiza este tipo de negocios. Preste especial atención a la publicidad que omite datos importantes para el consumidor o que utiliza técnicas persuasivas para motivar la compra.
5. Consulte a un profesional
Antes de acudir a uno de estos negocios de compra-venta de oro, puede consultar a un profesional del sector para que le asesore sobre las características de la joya, el peso y demás.
6. Revisa la tasación en varios locales
Infórmese sobre la tasación de los bienes en varios establecimientos. Aunque, para ello, se toman como parámetros de referencia los precios del mercado, en muchos casos se aprecian variaciones significativas entre las tasaciones que se hacen en unos sitios y en otros.
7. Exija el contrato de compraventa
La venta de las joyas debe formalizarse mediante un contrato de compraventa. Por tanto, exija una copia sellada del mismo en el que figuren todos los detalles de la operación (nº de joyas vendidas, valor de la tasación…). Conserve esta copia y cuanta documentación de la operación disponga, ya que le servirán de justificante en caso de reclamación.
8. Si sus derechos son vulnerados, solicite la Hoja de Reclamaciones
Solicite siempre la Hoja de Quejas y Reclamaciones en caso de que hayan sido vulnerados algunos de sus derechos como usuario. El comerciante tiene la obligación de ponerla a disposición del consumidor y debe de emitir respuesta en un plazo de diez días.