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Montaje de muchas monedas de peseta y tres fajos de billetes de 100 euros

La moneda de peseta con un error de Franco por la que están dispuestos a pagar mucho

Esta moneda de 25 pesetas tiene un gran valor en el mercado coleccionista

El mundo del coleccionismo de monedas es apasionante. A través del mismo, se pueden conseguir auténticas piezas de valor que multiplican ahora el precio con el que salieron en circulación.

Las pesetas son de las monedas de mayor valor de la historia de España. Además, los ejemplares que valen más son aquellos que cuentan con errores o rarezas que los convierten en únicos.

Es el caso, por ejemplo, de una moneda de pesetas que entró en circulación durante la época de Franco. Sin embargo, no es su contexto histórico lo que ha hecho que su precio aumente, sino un error palpable que hace que los coleccionistas la busquen sin cesar.

Esta moneda de 25 pesetas destaca

La moneda de la que hablamos es una de 25 pesetas emitida en 1957. Es decir, salió en circulación durante la época de Franco y cuenta con detalles que la han convertido en una de las más especiales.

Montaje de un fondo desenfocado de monedas y encima las dos caras de la moneda de 25 pesetas de 1957
Esta moneda salió en circulación en la época de Franco | Getty Images, Foronum

En este caso, se trata de una particularidad que no pasa desapercibida: la Estrella 58. Debido a esta rareza, la pieza es una de las mejor valoradas y de las más buscadas dentro del mundo del coleccionismo de monedas. Sobre todo, de pesetas.

Un error es lo que la hace única

Aunque si la ves de tan solo una pasada puede parecer una moneda más que data del Franquismo, lo cierto es que no es así. Para conocer su valor, es necesario mirar más allá y hacerse eco de todos sus detalles.

El error que la hace única es que, en lugar de tener un grabada su fecha correcta de emisión en su cara principal, el año 1957, tiene en uno de sus bordes una estrella con el número 58. Es decir, un año después de su producción.

Su escasez también le da un gran valor

Este fallo se debe a un error humano que sucedió durante el proceso de producción. Cuando se cambió de año se tendría que haber cambiado también el troquel de las monedas para poder reflejar la nueva fecha. Sin embargo, se olvidaron de este detalle.

Así, un número muy limitado de estas monedas salieron a la circulación antes de que alguien se diera cuenta del error. Esto ha hecho que a este fallo se una la escasez de estos ejemplares, por lo que los coleccionistas la valoran todavía más.

Los errores son clave en la numismática

Esta moneda, por sí misma, forma parte de la historia de nuestro país. No obstante, también es un gran ejemplo de cómo los fallos y los errores pueden aportar un gran valor en el mundo de la numismática.

Montaje de colección de monedas y manos cogiendo billetes de euro
Un error puede aportar mucho valor en el mundo numismático | Getty Images

Un simple desliz, en este caso, ha convertido a esta moneda de 25 pesetas en una de las piezas más buscadas de la época. Esto ha hecho que se incremente su valor y que los interesados estén dispuestos a pagar grandes cantidades de dinero por ella.

Este es el valor de esta moneda de 25 pesetas de 1957

En este sentido, la moneda de 25 pesetas de 1957 llama la atención tanto por su antigüedad como por sus errores y su escasez. Esto ha hecho que pueda contar con un precio que ha llegado a superar los 500 euros en algunas subastas online.

Por ello, una de las cosas que debes hacer es comprobar si cuentas con una de estas monedas en casa. Hay que recordar que se trata de una pieza considerada como “rara” y que es muy difícil de encontrar. Si está en buenas condiciones, podrás ganar dinero con ella.

Cómo puedes vender tu moneda

Para conseguirlo, puedes probar en portales de colección de monedas especializados, como son eBay, Catawiki, Foronum o Etsy, entre otros. Será necesario contar con fotos llamativas para multiplicar tus opciones. Por otro lado, también puedes ir de forma presencial a una tienda de antigüedades. Aquí la tasarán y te podrán ayudar a encontrar al comprador perfecto para la pieza.