La ciencia esconde un universo lleno de sorpresas e incógnitas y es muy caprichosa cuanto más investiga la Tierra y los sucesos atmosféricos en relación con ella. A veces, suelen salir a la luz ciertos fenómenos extraños como los que se han detectado en los últimos tiempos, que dejan a más de uno con el pie cambiado.
Nos referimos a aquellos ruidos detectados a más de 21.000 metros sobre la superficie de la Tierra llamados ultrasonidos, que están poniendo patas arriba cualquier tipo de explicación científica.
En las últimas horas, hemos comprobado un hecho sorprendente. Una investigación con globos que funcionan con energía solar por parte de la Acoustical Society of America (Chicago) ha detectado unos misteriosos ruidos en las capas bajas de la atmósfera.
Nadie puede explicar cuál es el significado de estos extraños ruidos en la atmósfera
En este caso, nos referimos a los ruidos procedentes de la estratosfera, unos sonidos de baja frecuencia a los que no encuentran explicación los científicos.
No son capaces de saber de dónde proceden estas teorías que podrían confirmarse próximamente en nuevos estudios. "Hemos detectado extrañas señales de infrasonido que ocurren varias veces por hora en la estratosfera, pero la fuente de estos sonidos es completamente desconocida". Así lo expresó el investigador Daniel Bowman.
Este es el especialista de los laboratorios nacionales Sandia en Nuevo México además de líder del equipo científico. En los últimos siete años, tanto Bowman como varios de sus compañeros científicos lanzaron 50 globos al cielo para lograr muestras de los sonidos de la estratosfera.
Los sonidos misteriosos detectados en la estratosfera no han podido reconocerse
Antes que nada, hay que saber en qué consiste la estratosfera. Esta capa queda situada en la atmósfera y se enmarca entre la troposfera y la mesosfera. Se extiende a partir de 14,5 kilómetros de la superficie de la Tierra hasta una altura de 50.
En su parte más baja contiene a la capa de ozono y suele ser una zona de pocas turbulencias. Lo cierto es que muchos de estos sonidos puede ser reverberaciones de frecuencias ultra bajas provenientes de la superficie del planeta.
Eso sí, si se combinan con el eco de las urbes, lanzamiento de cohetes e incluso de los aviones o las olas de los océanos, todo cambia. Y es que los científicos que han analizado estos ruidos han escuchado unos infrasonidos sin un origen concreto.
El oído humano no puede escuchar ruidos, pero estos expertos sí que pueden hacerlo. Lo hacen gracias a equipos técnicos avanzados.
La tarea de registrar estos ultrasonidos la llevaron a cabo gracias a globos de investigación atmosférica. Estamos hablando de bolsas de plástico enormes con polvo de carbón dentro de las mismas para hacerlos más oscuros.
Los científicos seguirán llevando a cabo estudios para descifrar el enigma
En el momento en el que el sol brilla sobre dichos globos, el aire interno se calienta y flota. Esta energía pasiva es válida para trasladar los globos de la superficie terrestre a una altura de 20 000 metros.
Según un artículo publicado en Live Science, cuando se estudió el paisaje sonoro de la estratosfera hubo un hecho inesperado.
Nos referimos a que estos infrasonidos citados en este artículo no han podido relacionarse a día de hoy con ningún otro sonido que conozcan los científicos.
Aun así, han salido a la palestra ciertas teorías y es que según los investigadores, podríamos hablar de una variedad de turbulencia atmosférica no identificada hasta la actualidad. O bien podrían ser unos ecos procedentes de la superficie terrestre, que se han distorsionado hasta volverse realmente extraños.
Con todo, la tarea de los científicos es llevar a cabo nuevos estudios en la atmósfera para así confirmar o desechar estas teorías en torno a un fenómeno tan peculiar.