Empieza la cuesta de enero y muchas familias españolas se preparan para hacer frente a los días más duros del año. Además, en plena crisis económica y de subida de los precios que lo hacen todo aún más difícil. Las ayudas del Gobierno son un bote salvavidas para muchos hogares.
En ese sentido, el gasto del Gobierno en ayudas lleva tiempo priorizando a las personas y familias más vulnerables. Por ejemplo, las personas sin empleo, con bajos ingresos y con responsabilidades familiares a cargo. Para muchas casas en España esas ayudas son la única vía de subsistencia.
Muchas de estas ayudas son incompatibles entre sí, como por ejemplo el Ingreso Mínimo Vital (IMV) y el nuevo cheque de 200 euros. Pero en cambio hay otras ayudas que sí son compatibles y que a veces los beneficiarios desconocen. Este es el caso del ingreso mínimo y la ayuda familiar.
El ingreso Mínimo Vital: una ayuda 533 euros al mes
El Ingreso Mínimo Vital (IMV) es una ayuda dirigida a las familias más vulnerables. Con la subida de las pensiones contributivas esta ayuda también ha aumentado su cuantía a partir del 1 de 2023: de 491,63 euros a 533,41. Para ello hay que acreditar la falta de recursos para las necesidades básicas.
Para recibir el IMV, el Gobierno exige tener residencia legal y efectiva en España y estar en situación de vulnerabilidad económica. Para ello hay que presentar un resumen de las rentas y el patrimonio. La cuantía de las ayudas va aumentando en función de los miembros de la unidad familiar.
El Ingreso Mínimo Vital es incompatible con la nueva ayuda del Gobierno de 200 euros para familias con bajos recursos. También es incompatible con la pensión no contributiva de jubilación, aunque sí es compatible con la pensión no contributiva de invalidez. Además se puede compaginar con la ayuda familiar.
La ayuda familiar: el otro subsidio de 480 euros mensuales
Por otro lado, la ayuda familiar está pensada para los parados de larga duración y con dificultades para encontrar trabajo. Pueden solicitar esta ayuda los trabajadores que hayan agotado el paro y tengan responsabilidades familiares. También trabajadores mayores de 45 a los que se les haya acabado la prestación.
Igualmente pueden acceder a esta ayuda los trabajadores que están sin trabajo, pero no tienen el mínimo cotizado para cobrar el paro. Todas estas características son compatibles con los requisitos del ingreso mínimo vital. Por eso es compatible cobrar el IMV y a la vez la ayuda familiar.
En 2022 la ayuda familiar ascendía a 463,21 euros, pero con la subida de las pensiones aumenta hasta 480. Por lo tanto, compaginar las dos ayudas podría suponer un ingreso de 1.013 euros por hogar. Sin embargo, hay una condición indispensable que deben cumplir los beneficiarios.
El único requisito para cobrar las dos ayudas
El único requisito para beneficiarse de las dos ayudas es que el importe no supere el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (750 euros). Si una persona cobra una ayuda y empieza a percibir la otra solo podrá recibir la parte correspondiente hasta llegar a los 750. En ningún caso podrá llegar a los 1.013 euros.
La mayoría de los solicitantes de estas ayudas son personas que viven solas, adultos con un menor a cargo o dos adultos sin menor a cargo. Para compatibilizar las dos ayudas hay que cumplir los requisitos exigidos en ambos casos. No cumplir los requisitos de una de las ayudas supone la incompatibilidad.
Hay que recordar que las dos ayudas están gestionadas por organismos diferentes. El IMV lo otorga el Instituto Nacional de la Seguridad Social, mientras que la ayuda familiar está gestionada por el Servicio Público de Empleo Estatal. Por lo tanto, tendrás que solicitar las dos ayudas de forma separada.