Si hay algo que nos regala la naturaleza, además de sus paisajes y animales, es sin lugar a dudas la vegetación. Existen miles de árboles y plantas con múltiples propiedades no solo para el ecosistema, sino también para el ser humano.
De hecho, el laurel es una de ellas. Muchas personas conocen sus hojas por la cultura y la tradición gastronómica. Ahora bien, ¿sabías que sus beneficios se pueden extender incluso más allá? Descúbrelos y aplícalos en tu día a día.
La efectividad de las hojas de laurel: Beneficiosas para las personas
Aunque su nombre científico es Laurus nobilis, la mayoría de nosotros conocemos esta planta por el nombre de laurel. Esta especie mediterránea, de tronco recto y corteza lisa, contiene aceites esenciales que la hacen muy característica y aromática.
El laurel es un árbol muy frondoso y no requiere demasiados cuidados. Ahora bien, lo más preciado que podemos sacar de él son sus hojas, las cuales se suelen recolectar en cualquier época del año. De hecho, nuestros antepasados ya lo hacían así.
Y es que si debemos destacar algo del laurel son sus propiedades antiinflamatorias y relajantes. Así mismo, también resulta muy efectivo como remedio natural contra los resfriados, ya que contiene propiedades expectorantes y antimicrobianas.
No obstante, las hojas del laurel pueden ofrecernos otros muchos beneficios, y concretamente, existe un truco que es muy efectivo y que muy pocas personas conocen. Para llevarlo a cabo, tan solo necesitarás colocar algunas hojas de laurel en tu baño.
Quizás te parezca algo extraño, pero cuando descubras la razón de esta recomendación entenderás todo. Como comentábamos antes, el laurel tiene múltiples propiedades, y entre las más destacadas hay una que aún no hemos dicho, y son las propiedades digestivas.
Por lo tanto, si dejamos unas hojas de esta planta en nuestro baño, nuestras digestiones pueden cambiar radicalmente. Puede que te estés preguntando cómo consigue el laurel hacer esto, pero no te preocupes, porque te lo vamos a explicar a continuación.
Al parecer, las hojas del laurel tienen unos compuestos que estimulan la producción de ácido gástrico y bilis, y por lo tanto, esto nos puede ayudar a descomponer mejor los alimentos que ya tenemos en nuestro estómago.
Si dejamos estas hojas aromáticas cerca de la ducha, el propio vapor que salga de ella se mezclará con la esencia del laurel. Por lo tanto, al respirar, todo ello entrará por nuestro cuerpo. De esta forma, nuestras digestiones podrán mejorar considerablemente.
Otros beneficios del laurel
Ya hemos comentado que el laurel es una planta muy utilizada en miles de cocinas y hogares, y esto es debido a la cantidad de propiedades y beneficios que tiene. Ahora bien, además de colocar algunas hojas en el baño, también puede extraer más cosas si lo consumes.
Y para ello, no hay nada como optar por el té de laurel. Normalmente se pueden utilizar tanto las hojas frescas o deshidratadas, ya que es a través de ellas donde extraeremos las sustancias que necesitamos (es decir, flavonoides, alcaloides, linalol y eugenol).
Puedes conseguir estas hojas en prácticamente cualquier supermercado. Sin embargo, también las puedes encontrar en tiendas de productos naturales, como herbolarios. En cualquier caso, lo mejor es pedir orientación a un médico o profesional.
Pues bien, debes de saber que el té de laurel le aportará grandes beneficios a tu cuerpo. Además de ayudar a tu sistema digestivo, si consumes esta bebida también podrás aliviar otros problemas gastrointestinales.
Así mismo, se ha demostrado que las sustancias de esta hoja pueden ayudarnos a controlar la diabetes tipo 2 y a disminuir el colesterol. De hecho, es un té muy efectivo para prevenir algunos problemas cardiovasculares.
Sin embargo, también es probable que a través de sus propiedades antiinflamatorias podamos aliviar dolores reumáticos o inflamaciones, y en muchos otros casos, también algunos problemas respiratorios.