Hoy en día, cualquier persona dispone de varias cuentas bancarias abiertas. Llegado el momento únicamente lo concentraremos todo en una o dos, lo que hará que el resto queden relegadas al olvido. Pero de no utilizarlas siempre nos exponemos a que Hacienda se acabe quedando con el dinero ante la falta de movimientos.
Resulta imprescindible tener contratado un producto de estas características con el banco. Ya sea para cobrar una nómina, una pensión, recibir una subvención o simplemente pagar unos recibos.
En ocasiones, suele darse el caso de que se tengan cuentas con distintas entidades financieras. Ya sea porque se encuentran cerca de nuestro domicilio o porque nos ofrecen unas condiciones más ventajosas. Lo aconsejable es disponer de al menos un par de ellas, ya que con una solo nos exponemos a sufrir algún tipo de problema.
Imagina que por cualquier motivo tengas que bloquearla. De ser así no podrías retirar dinero ni hacer ningún tipo de pago. También puede resultar un tanto excesivo contar con más de cuatro.
No hay que olvidar que en la actualidad la mayoría de bancos cobran comisiones de mantenimiento. Si sumamos todo lo que habría que pagar entre todas ellas, al cabo del año se nos escaparía una elevada cantidad de dinero.
Además, siempre corremos el riesgo de que alguna llegue a caer en el olvido. Ya sea porque no la utilicemos con regularidad o simplemente por pereza a la hora de cancelarla. Llegado el momento adquirirán la condición de abandonadas por parte de Hacienda.
¿Cuándo nos quedaríamos sin el dinero del banco?
Desde el Banco de España señalan que las "cuentas se declaran en presunción de abandono si durante 20 años no se ha producido ningún movimiento". Por lo tanto, los saldos que hubiera en ellas se traspasarían de manera directa a las arcas del Estado, publica La Razón.
Aunque puede parecer algo anecdótico, este tipo de situaciones se repiten con demasiada frecuencia. Y no siempre tienen que ser cantidades simbólicas de unos pocos euros o céntimos.
De hecho, en 2021, por este concepto, Hacienda ingresó unos 29 millones de euros. Esa cuantía procedía de cuentas abandonadas de los bancos, pero también de sociedades de valores y entidades de crédito.
¿Cómo actúan los bancos si detectan el abandono de una cuenta?
Cuando un cliente disponga de una cuenta que no utilice desde hace tiempo, la entidad bancaria tiene la obligación de comunicárselo. Debe informar de la existencia de la misma y que la citada situación le acarreará una serie de gastos.
En el caso de que detecten una presunción de abandono, el banco también deberán de avisar a los titulares. Esto tendrán que realizarlo antes de que reciban la notificación por parte del Ministerio de Hacienda y Función Pública.
La comunicación que harán llegar desde la entidad financiera se formalizará por medio de correo certificado o un canal similar. Lo remitirán a la dirección que conste en su registro.
Eso sí, advierten de que no harán el trámite cuando se dé la siguiente situación. No será necesario mandar el aviso "cuando el coste de la notificación supere, previsiblemente, el importe de los fondos", aclaran.
Cuando las cuentas del banco adquieren la condición de abandonadas, el dinero que había en ellas se ingresa en Hacienda. La entidad financiera tiene que proporcionar al titular la certificación que acredite que el saldo se entregó a la Administración General del Estado.
El organismo que se encargará de realizar esta declaración de presunción de abandono es la Dirección General del Patrimonio del Estado. Así que en caso de no estar conforme con la medida adoptada, la reclamación se haría ante el Ministerio de Hacienda.