La subida de las pensiones es algo en lo que se encuentra trabajando en estos momentos el Gobierno central. A lo largo de los próximos meses tienen que anunciar una actualización de las mismas. Sobre todo en un intento por adecuarlas lo máximo posible a la subida de precios.
Desde el Ejecutivo ya habían advertido que los aumentos se harían en función del Índice de Precios al Consumo (IPC). Por lo tanto, el incremento de las pensiones contributivas y no contributivas será una realidad en 2023. Eso sí, todavía queda por conocer las cuantías.
¿Qué cambios habrá con las pensiones el próximo año?
De momento, a falta de confirmación oficial, ya hay estimaciones de lo que podrían cobrar a partir de enero los jubilados y pensionistas. La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) considera que la subida del IPC llegará hasta el 7% antes de finalizar el año.
Desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social, Inclusión y Migraciones han reiterado que se mantendrá lo pactado inicialmente. Dichas pagas se revalorizarán según lo establecido por ley.
Es decir, según el IPC medio y sin importar el gasto extra que ello implique. Por lo tanto, si no hay un cambio de última hora, este incremento vendrá determinado por el valor que marque noviembre.
La previsión es que la pensión mínima de jubilación llegue hasta los 1075 euros. Esto implicaría un aumento mensual de 70 euros. En lo que se refiere a la pensión máxima, la subida se dejará notar mucho más.
En estos instantes se encuentra en 2819 euros al mes, y llegaría a alcanzar los 3016,33 euros. Esto sería posible gracias a un incremento de más de 197 euros. En cualquier caso, hay que aclarar que de momento se tratan de cifras orientativas, pendientes de que el Gobierno las confirme.
Tampoco se quedarán atrás los pensionistas no contributivos. En su caso, sus pagas también irán al alza. Pasarán de los 421,40 euros mensuales hasta los 450,89.
Las pensiones mínimas en 2023
Para conocer cuánto subirán las pensiones en 2023 habrá que estar muy atentos a lo que decida el Gobierno. Se trata de un tema que ya tienen sobre la mesa desde hace tiempo y que están analizando con lupa. A continuación te detallamos como quedarían las cuantías mínimas de los cinco tipos de pensiones contributivas.
1. Pensión de jubilación
La jubilación con 65 años, con cónyuge a cargo quedaría fijada en 952,83 euros, mientras que sin cónyuge sería de 772,21 euros. Con cónyuge no a cargo ascendería a 732,95 euros.
Por su parte, los jubilados con menos de 65 años con cónyuge a cargo percibirían 892,38 euros. Sin cónyuge se reduciría a 720,32 euros y con cónyuge no a cargo a 682,87 euros.
2. Pensión por incapacidad permanente
Aquellos que tengan declarada una incapacidad permanente de gran invalidez contarán con una pensión que iría de 1099,42 euros a 1432,51. Los que presenten una incapacidad permanente de absoluta o total con más de 65 años recibirían entre 732,95 y 952,83 euros.
Con una incapacidad permanente de total entre 60 y 64 años, la cuantía rondaría entre 722,46 y 893,34 euros. Por debajo de los 60, la cifra oscilaría entre 564,31 y 569,24 euros. Con una incapacidad permanente de parcial por un accidente de trabajo con 65 años, dicha pensión sería de 732,95 a 952,83 euros.
3. Pensión de viudedad
La pensión de viudedad alcanzaría los 834,90 euros cuando haya cargas familiares. Mientras que con 65 años o una discapacidad del 65% o más llegaría a 721,70 euros. Entre 60 y 64 años se cobraría 722,46 euros, mientras que por debajo de los 60, la cifra a percibir sería de 585,07 euros.
4. Pensión de orfandad
En el caso de un beneficiario ascendería a 236,14 euros, mientras que cuando se trate de un menor o de un joven con discapacidad de al menos el 65%: 464,38 euros. Otra cosa bien distinta es cuando se trate de una orfandad absoluta. En ese caso, un beneficiario percibiría 784,63 euros.
5. Pensión en favor de familiares
Un beneficiario recibiría una pensión de 236,14 euros. Cuando no haya ni viuda ni huérfano, el beneficiario de 65 años cobraría 570,41 euros, mientras que por debajo de esa edad serían 537,56 euros.