A continuación, te dejamos la receta de pizza casera de Jordi Cruz. La pizza mediterránea es un plato sabroso y fácil de preparar, mucho más que otro tipo de pizzas, y si la haces de forma casera, puedes incluirla en tu dieta mucho más que las precocinadas.
Este tipo de pizza se basa en alimentos naturales y en productos de la dieta mediterránea como el tomate, albahaca, orégano, aceitunas…. Estos han sido algunos de los ingredientes que Jordi Cruz, chef del restaurante ABaC, con tres estrellas Michelin, ha utilizado para la receta que ha compartido con sus seguidores de Instagram.
En esta ocasión, Jordi Cruz ha enseñado paso a paso como preparar una auténtica pizza mediterránea. Su dos principales consejos han estado dirigidos a la elaboración de la masa y al horneado de la misma. A continuación, os dejamos la receta de la pizza casera de Jordi Cruz.
Pizza Mediterránea de Jordi Cruz
Para la masa:
- 250 harina de fuerza
- 150 ml agua
- 8 gr sal
- 5 gr Levadura prensada
- 10/15 ml Aceite Arbequina
Para la salsa de tomate:
- 1 kg tomate triturado filtrado
- 2 cebollas
- 2 ajos
- Orégano, laurel y albahaca
- Sal y pimienta
Para terminar la pizza:
- Bacon ahumado
- Sobrasada ibérica
- Queso Parmesano
- Queso azul
- Aceitunas verdes y negras
- Hojas de albahaca y rúcula
La receta, paso a paso
- Primeramente, se divide en dos partes los ingredientes para hacer la masa: Solido y líquido. Por un lado, se pone en un vaso de agua tibia, 5 gramos de levadura, se mezcla y se deja reposar. Mientras se pone 250 gramos de harina de fuerza en un bol y se espera unos 3/4 minutos. A continuación, se vuelve a coger el vaso con agua tibia y levadura, se echa 10 ml de aceite, 8 gramos de sal y se vierte en el bol con la masa.
- Seguidamente, se utiliza una varilla para integrar todos los ingredientes durante 2 minutos aproximadamente hasta que más o menos quede lisa y se despegue de los bordes del bol.
- Una vez integrada, se trabaja un poco la harina con las manos hasta que no se pegue casi nada y después se pone una gotita de aceite en un bol. En este se ubica la masa en forma de bolita y se sella con papel film dejándola reposar una hora para que doble su volumen.
- Cuando haya pasado la hora, se saca la masa del bol y se pone en la madera. La masa se separa en dos mitades, se hacen dos bolitas y se ponen en un bol hermético en la nevera durante uno o dos días para que fermente.
- Al día siguiente, se empieza a trabajar la masa otra vez y para que no se pegue en ninguna parte se utiliza samolina (una harina más gruesa). Seguidamente, se utiliza un rodillo para estirar y extender la masa (si no se dispone de uno se puede expandir la masa girando y estirando los bordes).
- Después se coge un papel de horno y se pone la masa trabajada y moldeada en forma de pizza encima. Acto seguido se precalienta el horno media hora antes para reproducir un horno de piedra y que la masa se tueste por abajo y quede crujiente.
- Para terminar y condimentar la masa se vierte la salsa de tomate preparada y además se eligen 15 cherris, se pelan, se cortan a la mitad y se aliñan como si fuese una ensalada, es decir, le añadimos una gotita de aceite, sal, pimienta, se ponen en una fuente de horno y se salan por encima. Una vez hecho esto, se ponen los tomates cherris a 125 grados en el horno (con aire añadido) y se dejan dos horas.
- Cuando pasa el tiempo establecido se cogen los cherris pasificados y se ponen en la pizza. Seguidamente se agregan dos tipos de queso: daditos de queso azul y lascas de parmesano y se distribuyen por la pizza. En cuanto a la carne, se elige sobrasada y bacon.
- La sobrasada ibérica se hace cachitos y se pone un poco por encima de la pizza. El bacon, en cambio, se tuesta un poco en la sartén y después se pone en la pizza.
- Se añade un poco de polvo de albahaca, unas aceitunas verdes y negras y se hornea la pizza durante solo seis minutos. Una vez hecha se saca del horno se le pone por encima un poco de rúcula y lista.