La lista de la compra es una de las tareas más frecuentes que hay que organizar y planear a consciencia. Pero la inflación está haciendo estragos, y algunas consecuencias directas es la falta de determinados alimentos en los supermercados. Es cierto que, en la lista de la compra, podemos incluir no solo alimentos del día a día, sino también productos de droguería y de limpieza.
Normalmente, una familia acude al supermercado a cubrir el gasto de alimentos, al menos una vez a la semana. Las compras más grandes suelen hacerse cada mes o cada 15 días. En cuanto a las compras semanales están basadas principalmente en los alimentos perecederos y que más consumimos.
El increíble aumento de precios en los productos de alimentación
El coste económico de la alimentación ha crecido exponencialmente, por lo que ahora el gasto es mucho mayor. Incluso muchas familias han optado por dejar de comprar ciertos productos o pasarse a marcas blancas porque les es imposible adquirir los productos que solían comprar.
¿Qué alimentos son los más frecuentes y habituales en la lista de la compra? Sin duda, existen algunos alimentos recurrentes en los carros del supermercado. Las familias suelen comprar agua, leche, pan y cereales, como productos indispensables en su dieta.
Sin embargo, otros que son igualmente indispensables no son del todo frecuentes. En este caso, las legumbres, las frutas o las verduras son los básicos de una alimentación, pero no todas las familias los consideran importantes. Uno de los sectores que más cambios ha sufrido ha sido la leche, pues este sector está sufriendo, como hemos mencionado, un desabastecimiento.
¿Qué está ocurriendo con la leche?
Esta industria empieza a tambalearse pues ha ido reduciéndose la producción de la misma, obligando a muchos ganaderos a sacrificar a los animales para ayudar a salvar las granjas.
Es realmente preocupante y por ello España ha comenzado a recibir la leche directamente desde Francia, ante la gran caída de la producción en nuestro país. Aunque el desabastecimiento aún no se ha hecho del todo efectivo, existen señales alarmantes y la incertidumbre ha aumentado exponencialmente.
Todo está sufriendo un cambio drástico, que ha surgido de la noche a la mañana, después de que algunas de las consecuencias de la guerra de Ucrania se hayan ido extendiendo a muchos ámbitos o sectores.
Pero no solo estamos encontrando problemas en los alimentos. La economía también se está resintiendo. Y desde Bruselas piden menos subvenciones y préstamos, para reducir la morosidad.
¿Qué dice la Unión Europea?
La Unión Europea es muy estricta en ciertos aspectos, por eso lanzan avisos a España poniéndolos en sobre aviso sobre la reestructuración de las pensiones. Si José Luis Escrivá no mantiene una buena sostenibilidad financiera y no hay un buen sistema informático para controlar los fondos, España notará los efectos secundarios perdiendo partes de los fondos.
Después de lo sucedido en Ucrania, muchos países como Somalia, Etiopía o Afganistán, han sufrido un desajuste. Ahora son muchos más niños que necesitan ayuda. El director de Unicef España ha confirmado la preocupante situación, pues se ha multiplicado el número de niños que necesitan ayuda humanitaria.
Son muchas las crisis que están surgiendo en el mundo, como el importe de la leche de Francia a otros países como España. Esta situación tan desesperante, está provocando que muchos empresarios tomen medidas igualmente desesperadas ante la inminente respuesta de los altos cargos políticos.