La baja laboral es el derecho que asiste a un trabajador cuando está enfermo y no puede desempeñar sus funciones. Durante el tiempo que dura la baja, el empleado sigue percibiendo una parte del salario. Pero muchos tienen la duda de si tienen derecho a recibir también la paga extra.
La mayoría de los trabajadores en España recibe 13 pagas anuales (una paga mensual más la paga extraordinaria). Normalmente, en Navidad se abona una paga extra cuya cuantía suele ser el sueldo de un mes. También hay algunos trabajadores que reciben la paga extra prorrateada en su salario.
Cuando un trabajador coge la baja laboral, tiene derecho a percibir la paga extra siempre que cumpla un requisito. Debe haber cotizado al menos 180 días en los últimos cinco años, además de estar dado de alta en la Seguridad Social. Esto es lo que dice la ley sobre estos casos que generan tantas dudas.
Baja laboral y paga extra: ¿cómo funciona?
Un trabajador solo puede estar de baja médico temporal durante 365 días, con posibilidad de una prórroga de 180 días. Cualquier asalariado de alta en la Seguridad Social tiene derecho a percibir las gratificaciones extras. Incluso cuando el contrato se encuentre suspendido temporalmente por una baja médica.
La única condición es estar dado de alta en la Seguridad Social y tener un mínimo de 180 días cotizados en los últimos cinco años. Si cumple este requisito, el trabajador recibe la paga extra en función de la base reguladora. Por lo tanto, percibirá solo un porcentaje de la paga extra que recibe habitualmente.
Normalmente, por una baja por enfermedad común el trabajador percibe el 60% de la baja reguladora los primeros 21 días. A partir de entonces cobra el 75% de la base reguladora, que se aplica también a la paga extraordinaria. Al superar el tiempo máximo por baja temporal, tiene que pedir una prórroga.
¿Cuánto tiempo puedes estar de baja?
Los trabajadores cuya enfermedad impide el desempeño de sus funciones pueden pedir una baja de mínimo un año, prorrogable a seis meses. Pasado este tiempo, si persiste la enfermedad, deben solicitar una baja de incapacidad permanente. Deben acreditar la situación ante una comisión.
El empresario tiene la obligación de pagar la parte proporcional que corresponde a un trabajador de baja. El empleado puede reclamar a la empresa, y en última instancia recurrir a la justicia ordinaria. Mientras, puede solicitar el pago directo a la Seguridad Social de forma telemática.
El trabajador de baja también puede exigir el fin del contrato, lo cual da acceso al derecho a una indemnización. El empleador está obligado a indemnizar al trabajador por incumplir sus obligaciones de pago. La indemnización en estos casos es la que se concede por el despido improcedente.
Sentencia pionera en los tribunales
Lo dictado por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) podría cambiar esta situación a partir de ahora. Según este tribunal, la suspensión de un contrato por motivo de baja temporal excluye la posibilidad de que el trabajador reciba las pagas extraordinarias. El empleador no está obligado a abonar este sueldo extra.
En este caso, sin embargo, era muy específico, ya que se originó por una demanda de la trabajadora por despido improcedente. Fue despedida de su trabajo por quedarse dormida, aunque ella alegaba que fue por una indisposición. La demandante exigía la paga extra por una baja temporal.
El tribunal asegura que “durante los períodos de incapacidad temporal no se devengan las pagas extraordinarias”. También establece que “el despido tendrá que liquidarse con la parte proporcional del tiempo de baja”. En todo caso, la sentencia cuestiona el cobra de la paga extra durante la baja laboral.