Un accidente de tráfico puede originarse por un despiste, un exceso de velocidad o simplemente un infortunio. Pero a esta lista también debería incorporarse un aspecto que suele pasar desapercibido para la mayoría de conductores. Se trata del color del vehículo.
Varios estudios desvelan que esto influye en el riesgo de sufrir un percance en la carretera. Un estudio elaborado por la Universidad de Auckland y del que se hacía eco Mapfre aseguraba que había ciertas tonalidades que resultaban más peligrosas.
Al parecer, había más posibilidades de sufrir un accidente de tráfico con coches negros, marrones y verdes. Por su parte, en el lado opuesto de la balanza encontrábamos a los grises, amarillos y rojos.
¿De qué color son los coches que más accidentes sufren?
De este informe también se desprende otro dato muy interesante. Los vehículos con un color gris plata contaban con un 50% menos de probabilidades de protagonizar un percance, comparándolos con los rojos o blancos.
Unos resultados muy similares obtenía el Centro de Investigación de Accidentes de la Universidad de Monash. De sus análisis se extrae que los coches más oscuros, sobre todo los negros, suelen ser más propensos a sufrir percances.
Hay un motivo de peso que puede explicar esto. Y es debido a la menor visibilidad de estos vehículos, sobre todo durante la noche o en situaciones de climatología adversa como la niebla.
Se desmiente un falso mito
Por lo tanto, los vehículos con tonalidades más oscuras presentan más opciones de padecer un siniestro. Todos estos estudios sirven, sin lugar a dudas, para desmentir la creencia popular de que los coches con colores chillones resultan más peligrosos. Siempre se pensó que los rojos y amarillos tenían un mayor número de percances.
Se había vinculado todo esto al comportamiento más agresivo de los conductores, pero la realidad demuestra todo lo contrario. La mayoría de los que optan por este tipo de tonos suelen ser gente joven o con un estilo moderno. En muchos casos se trata de gente con poca experiencia, pero no siempre son los responsables de estos accidentes.
En el comparador de seguros Rastreator lo consideran "una leyenda urbana", como recogía ABC. Además, consideran que la tonalidad de un turismo no influye en el importe de la póliza del seguro.
Explican que las compañías de seguros "desmienten que el color sea una prima extra que debamos pagar en nuestro seguro de coche". Por su parte, sí que adquieren una especial relevancia otros detalles. Es el caso de la edad del conductor, historial de accidentes y características del vehículo.
La personalidad del conductor influye sobre el color
La personalidad de un conductor siempre quedará plasmada en la elección del color. Un estudio desarrollado por la Facultad de Psicología de la Universidad Carlos III de Madrid así lo desvela. Señalan que los coches con colores más vivos suelen ser dirigidos por personas que asumen más riesgos.
Por su parte, aquellos con más años de experiencia al volante se decantan por opciones más discretas, como son los tonos oscuros. Hace unos años, un informe de la compañía Arval, confirmaba que el color determinaba una serie de rasgos del propietario. Entre otras cosas revelaba su estilo de vida, personalidad y características demográficas.
Por ejemplo, los propietarios de vehículos blancos con una media de 38 años suelen ocupar altos cargos en las empresas. Los de los coches negros, con una media de 41 años, se consideran gente creativa e inteligente, dispuestos a nuevas experiencias. Por su parte, los de turismos azules, de 45 años, saben escuchar y son más empáticos.