Seguramente lleves años efectuando tus compras sin saber que los supermercados tienen un límite. Y es que, aunque cada vez sea menos común pagar en metálico, lo cierto es que los clientes que opten por este método de pago podrían encontrarse con una "barrera" para efectuar sus compras.
Es el caso de cadenas como Carrefour o Lidl, las cuales cuentan con un límite fijado respecto a la cantidad de dinero en efectivo que puede pagar una persona en sus establecimientos.
El límite de efectivo del que disponen cadenas como Carrefour o Lidl
Si no quieres encontrarte con la incómoda situación de quedarte sin tus compras por haber traspasado dicho límite, te interesará conocer hasta qué cantidad es posible pagar en efectivo. Sobre todo, si formar parte de ese grupo de consumidores que sigue siendo fiel partidario de pagar todo en efectivo y no de forma electrónica.
Por ello, en el caso de que quieras pagar únicamente con monedas y billetes, deberás respetar el límite que se encuentra en los 999,99 euros. Es decir, si el coste de tu compra es superior a los 1.000 euros, deberás abonar la diferencia con otro método de pago o pagar directamente toda la compra con este último método.
Y aunque hemos nombrado, concretamente, a Carrefour y Lidl, lo cierto es que la mayoría de supermercados cuentan con esta "normal", como también es el caso de Mercadona. Los cuales han señalado que el motivo que sustenta esta decisión no es otro que el que dicta la Ley en España.
En un apartado de su página web, confirmaban que: "Por Ley, no podemos aceptar pagos en efectivo de más de 999.99 euros. Si el importe de tu compra es superior, puedes pagar hasta esa cantidad en efectivo y el resto de la compra con tarjeta".
La normativa que justifica el límite impuesto por los supermercados
Las cadenas de supermercados aclaran que, pese a los posibles inconvenientes, la toma de esa medida se basa en el artículo 18 que recoge la Ley 11/2021, impulsada para ofrecer medidas de prevención a la ciudadanía con intención de frenar el fraude fiscal.
De este modo, el límite para pagar en metálico ha pasado de encontrarse en los 2.500 euros hasta la cantidad actual. Como propiamente recoge el BOE: "No podrán pagarse en efectivo las operaciones, en las que alguna de las partes intervinientes actúe en calidad de empresario o profesional, con un importe igual o superior a 1.000 euros o su contravalor en moneda extranjera".
Pagar en efectivo sigue siendo una práctica de lo más habitual en España
Y aunque lo más común sea pensar que el pago electrónico es la opción favorita de los consumidores, el último estudio del Banco de España lo desmiente. Según en análisis que llevó a cabo la entidad bancaria, el dinero en efectivo sigue siendo el principal medio de pago, pues el que se usa con mayor frecuencia.
Ya en segunda y tercera posición, es posible encontrar las tarjetas o los dispositivos móviles, como los teléfonos o los relojes inteligentes. Asimismo, el estudio ha confirmado que la mayoría de la población está a favor de seguir usando el efectivo.
Lo creen, sobre todo, los usuarios de mayor edad, pues el uso diario del efectivo es más frecuente entre los mayores de 54 años (71%) y no tanto entre los más jóvenes (43%). Sin embargo, el pago con efectivo cuenta con una "desventaja" que también ha recogido el estudio. Y es que, la calidad y la conservación de los billetes debería mejorar, según los participantes del estudio. Para ellos, las medidas deberían centrarse especialmente en los billetes de menor valor, pues suelen ser los más afectados.