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Mujer joven durmiendo profundamente sin luz artificial

Los 7 trucos para dormirte en plena ola de calor y con la humedad disparada

El calor puede perjudicar a tu descanso, pero hay trucos que van muy bien

Las altas temperaturas son unas de las grandes enemigas del sueño. Si te cuesta dormir cuanto más calor hace, debes saber que es algo muy común, sobre todo en verano.

Según la Sociedad Española del Sueño, este aparece cuando desciende la temperatura corporal debido a la redistribución del calor desde dentro del cuerpo hacia la periferia.

Además, el organismo también asegura que la temperatura corporal depende mucho de la ambiental. Por este motivo, nos cuesta descansar más si la temperatura es elevada. Sin embargo, los expertos también realizan algunas recomendaciones que te pueden ayudar.

7 trucos que tener en cuenta para dormir mejor con el calor

Si quieres dormir incluso cuando el calor te resulta demasiado agobiante, estos consejos te podrán ser de gran ayuda.

1. Usa un ventilador de techo

Cuando vas a dormir, lo mejor es dejar abiertas algunas ventanas, con el objetivo de que se genere una corriente de aire en la habitación. Sin embargo, nunca está de más hacer uso de un ventilador.

En este caso, el mejor, según los expertos, es el de techo. La razón es que refrescan sin que haga frío, cosa que sí sucede con métodos como el aire acondicionado.

Mujer joven durmiendo con un antifaz de color azul
Para dormir bien, es preferible un ventilador al aire acondicionado | Getty Images

2. Mantén fresca la habitación

Por supuesto, que la habitación esté fresca es imprescindible. Esto lo puedes conseguir llevando a cabo ciertas técnicas durante todo el día. Por ejemplo, puedes ventilar a primera hora de la mañana, momento en el que la temperatura es más baja. De este modo, el aire caliente acumulado saldrá por la ventana.

Justo después, baja las persianas y no dejes que entre el calor del sol. Por otro lado, evita los aparatos eléctricos y deshazte de la colcha o las mantas. Lavarlas a menudo también es un método para aumentar el frescor.

3. Usa ropa de cama delgada

La ropa de cama es muy importante. Al hilo de lo anterior, además de quitar cuando llegue el calor tanto la colcha como las mantas, es también imprescindible elegir a conciencia el material o tejido de las sábanas. En este sentido, lo ideal es colocar tan solo una sábana, o acompañarla con una colcha fina, asegurándote de que sean de algodón.

Mujer joven descansada y estirando los brazos después de haber dormido
Evita colocar mantas o colchas para mantener tu cama fresca | Getty Images

4. Lo mejor es cenar ligero

Antes de ir a dormir, para conciliar mejor el sueño durante la ola de calor, es importante también cenar ligero. Algunas recetas pueden ser cremas de verduras, así como ensaladas refrescantes. 

Algunos de los alimentos más refrescantes son la lechuga, el limón, la mandarina, el tomate, las espinacas. Escoge aquellos que más te gusten y opta por recetas que no vayan a ser pesadas a la hora de digerirlas. Por último, es necesario cenar al menos un par de horas antes de acostarte.

5. Dormir sin pijama no es lo mejor

Por regla general, se suele pensar que lo mejor, para soportar las altas temperaturas, es dormir desnudo. Sin embargo, parece que esto no es del todo cierto.

Los expertos recomiendan usar pijama para dormir mejor y descansar más tiempo. La razón es que el cuerpo acumula sudor y, si no se elimina a través de un tejido que absorba la humedad, te será más complicado descansar. Para asegurarte el sueño, usa un pijama fino de algodón o prendas transpirables.

6. Una ducha te irá genial

Un buen truco para irte a la cama bien fresco es darte una ducha justo antes de que vayas a dormir. Lo mejor es hacerlo con agua tibia en vez de fría por completo, para que no te despejes. Si lo prefieres, también puedes mojarte la nuca y las muñecas con agua fría.

Primer plano de cabeza de una botella echando agua en un vaso de cristal
Beber agua a lo largo del día hará que duermas del tirón toda la noche | Getty Images

7. Hidrátate todo el día

A la hora de descansar mejor, es importante mantener unos buenos hábitos a lo largo de todo el día. En este sentido, beber agua con regularidad te podrá ayudar con tu cometido.

Si tu cuerpo siente que está deshidratado, experimentarás gran dificultad por conciliar el sueño por muy débil que te sientas. Además, de este modo, no querrás beber tanta agua durante la noche, por lo que dormirás sin interrupciones.

8. No hagas ejercicio por la tarde

Por último, si acostumbras a hacer ejercicio por la tarde, lo mejor será que evites este hábito cuando el calor apriete. Intenta practicarlo por la mañana, pues un ejercicio intenso es estimulante y, además, aumenta la temperatura corporal. Algunos estudios demuestran que si lo haces después de las 18 horas dormirás peor.