Esta Semana Santa hay que extremar las precauciones al volante más que nunca. Se esperan millones de desplazamientos durante los próximos días. En nuestra mano está reducir las incidencias que ocurren durante los viajes, sobre todo si somos capaces de evitar las carreteras más peligrosas.
La Operación Salida daba comienzo el pasado viernes 31 de marzo a las 15:00 horas. Pero los datos registrados durante los últimos tres días han sido demoledores. Hubo once personas fallecidas y otras seis resultaron heridas en los ocho accidentes mortales.
En España se estima que hay unos 500 kilómetros de carreteras especialmente peligrosos. El más preocupante se localiza en el km 245 de la N-2 en Zaragoza. Su índice de peligrosidad es 686 veces superior al de la media del país.
La asociación Automovilistas Europeos Asociados (AEA) fue la encargada de analizar hace un tiempo el índice de peligrosidad de las vías españolas. Para ello tenía en consideración los tramos de un kilómetro con un Índice de Peligrosidad Medio durante el último lustro superior a 100. Esto supone que al menos presentarán un riesgo de peligrosidad diez veces mayor al de la media nacional, que era de 9,5.
Estos son las carreteras con más accidentes
En la provincia de Zaragoza, en el km 245 de la N-2 se encuentra el tramo de carretera más peligroso del país. El índice de peligrosidad es extremadamente elevado. Pero el sitio con más accidentes se localiza en Pontevedra, en el km 12 de la A-55, a la altura de Mos.
En el estudio efectuado entre los años 2015 y 2019 se detectaron un total de 108 accidentes, con 194 víctimas. El segundo lugar con mayor concentración de percances nos lleva a Alicante, al km 0 de la autovía A-77a, con 100 siniestros y 128 víctimas.
Por su parte, la autovía T-11, en Tarragona, en el km 17, contabilizó en ese periodo 95 accidentes y 155 víctimas. Si únicamente se tomaran como referencia los datos de autovías y autopistas, el punto con más riesgo lo localizaríamos en Toledo. El km 20 de la AP-41 presente un índice de peligrosidad 43 veces el índice medio del país.
Las autopistas de peaje, a simple vista parecen más seguras, pero también tienen su cierto riesgo. La que más incidencias presenta es la AP-7, en el km 146, en Barcelona. Contabilizó 95 siniestros, con un total de 161 víctimas, en donde la gran mayoría fueron heridos leves.
Las carreteras convencionales que deben evitarse
Desde Automovilistas Europeos Asociados (AEA) realizan una clasificación con aquellos tramos más peligrosos en las carreteras convencionales. El índice de peligrosidad más alto lo encontramos en la N-2 de Zaragoza, por donde circulan a diario 42 vehículos.
A continuación está la N-4a, en Jaén, con los puntos kilométricos 249, 252 y 253, con un índice de riesgo de 3.513. En cuarta posición hay que detenerse en la N-122, en el km 530, en Zamora, que acoge a diario unos 87 coches. El índice de incidencia llega hasta 2.166.
En Toledo está la N-400, también considerado otro punto negro por esta asociación en los km 82 y 81. El índice de riesgo alcanza los 2.767 y 1.181 puntos, respectivamente. Por ella circulan 99 y 125 vehículos de media.
Muy cerca de allí hay que hacer parada en la misma carretera, pero en esta ocasión en un tramo que se encuentra en Cuenca. El riesgo de peligrosidad alcanza los 1.734.
Por último, otro de los tramos a evitar siempre que pueda ser posible nos conducirá hasta Castellón. En la N-234, en sus km 19 y 20, que suelen acoger de media 160 y 164 vehículos a diario.